Dado el gran esfuerzo que están llevando a cabo las empresas del sector fotovoltaico para garantizar el funcionamiento de la actividad en todas las etapas de la cadena de la valor de la tecnología, UNEF (Unión Española Fotovoltaica), ha pedido al Gobierno que se considere al sector como actividad estratégica en caso de tomar medidas más estrictas para frenar el COVID-19.
UNEF ha emitido un comunicado en relación a la situación actual de estado de alarma por el COVID-19 en el que pone de manifiesto la gran importancia de la actividad del sector fotovoltaico, por un lado, por su suministro de energía y, por otro, por la continuidad en la construcción de nuevos proyectos que contribuyan al cumplimiento de los objetivos establecidos por el PNIEC, así como de los compromisos medioambientales internacionales.
En estos primeros tres meses de 2020, el sector ha generado 2.354 GWh de energía limpia. Además, emplea a más de 29.000 personas y que contribuye al PIB nacional en más de 5.000 millones de euros.
Medidas contra el COVID-19
En este sentido, entre las medidas puestas en marcha en aras de garantizar la seguridad y la salud de los profesionales, destacan la reducción al mínimo posible del personal presente en las obras de construcción de nuevos parques, procurando que se trate de personal local para evitar desplazamientos de otras regiones.
En el caso de empresas que se encargan de la operación y el mantenimiento de las plantas fotovoltaicas ya existentes, se está impulsando el uso del vehículo personal con un único ocupante y se está proporcionando a los profesionales equipos de protección individual, como mascarillas o guantes.
También, además de cerras oficinas e implementar el teletrabajo, otra de las medidas es la suspensión de los desplazamientos de los instaladores de infraestructura de autoconsumo fotovoltaico, aunque el seguimiento del rendimiento de estas instalaciones continúa con normalidad a través de herramientas online.
La fotovoltaica, fundamental para la economía española
Todas estas medidas están dirigidas a garantizar la continuidad de un sector que en estos primeros tres meses de 2020 ha generado 2.354 GWh de energía limpia, que emplea a más de 29.000 personas y que contribuye al PIB nacional en más de 5.000 millones de euros.
Desde UNEF, probado el papel fundamental que desempeña el sector fotovoltaico en la lucha contra el cambio climático, además de la riqueza del tejido industrial que forma, piden al Gobierno que considere su sector como actividad estratégica si llega el momento de tomar medidas más restrictivas con el fin de frenar el avance del coronavirus.
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Graduado en Periodismo por la Universidad Complutense. Redactor en energynews.es, movilidadelectrica.com e hidrogeno-verde.es.