Hace tan solo un año que se inauguró una planta de E.ON que utiliza electricidad de origen renovable para alimentar equipos de electrólisis que transforman el agua en hidrógeno. Está en Falkenhagen, al este de Alemania, y la compañía ha confirmado el éxito de su funcionamiento, ya que actualmente inyecta más de dos millones de kWh de hidrógeno en la red de suministro de gas.
La planta piloto Power to Gas (P2G) de E.ON utiliza energía eólica para hacer funcionar el equipo de electrólisis que transforma agua en hidrógeno, que a su vez es inyectado en la red de distribución de gas de la región. De esta forma, el hidrógeno pasa a formar parte del mix del gas natural y puede ser utilizado para una gran variedad de aplicaciones, incluyendo calefacción, procesos industriales, movilidad, y la generación de energía. La unidad, que tiene una capacidad de dos megavatios, puede producir 360 metros cúbicos de hidrógeno por hora.
Con esta planta experimental la gigante eléctrica alemana E.ON quiere demostrar que los excedentes de energía pueden ser almacenados en los gasoductos para ayudar a equilibrar el suministro y la demanda energética.
“Falkenhagen nos ha proporcionado una valiosa experiencia que nos ayudará a perfeccionar múltiples aspectos de la tecnología de conversión de energía en gas, desde la forma de desarrollar el proceso de aprobaciones regulatorias para construir y operar plantas P2G, hasta la comercialización de su producción de hidrógeno. Tras un solo año, podemos decir que P2G tiene un gran potencial. Vemos incluso oportunidades a corto plazo para aplicaciones comerciales en áreas como la movilidad“, ha declarado Ingo Luge, CEO en Alemania de E.ON.
Características de la planta
La planta de Falkenhagen utiliza electricidad de origen eólica para alimentar equipos de electrolisis que transforman el agua en hidrógeno. Éste a su vez se inyecta en el sistema de distribución de gas natural. Con una capacidad de dos megavatios, puede producir hasta 360 metros cúbicos de hidrógeno por hora. La energía almacenada se convierte en parte del suministro de gas natural y se puede utilizar para calefacción, aplicaciones industriales, para áreas como la movilidad, y en la generación de energía. E.ON proporciona parte de su producción de hidrógeno en Falkenhagen a su socio en el proyecto, Swissgas AG, y también lo ofrece a sus clientes residenciales a través de su producto “E.ON WindGas”.
E.ON está construyendo una segunda planta piloto P2G en Reitbrook, a las afueras de Hamburgo. El propósito de esta unidad, que entrará en funcionamiento en 2015, es optimizar el proceso de transformación gracias a equipos de electrólisis más compactos y eficientes.
El almacenamiento de energía
Para las autoridades alemanas, “esta forma de almacenamiento de energía está considerada como una tecnología estratégica para la transformación del sistema energético alemán. Reducirá la necesidad de parar las turbinas eólicas cuando las redes eléctricas locales estén saturadas y nos permitirán aprovechar en mayor medida esta energía renovable”.
E.ON ha construido esta planta en la ciudad de Falkenhagen por su localización inmejorable. La región ya cuenta con una gran capacidad instalada de energía eólica, con las infraestructuras necesarias de gas y electricidad y, además, E.ON dispone de un centro de control allí.
La planta usa tecnología ya testada, lo que hace que el proyecto sea idóneo para servir como plataforma tecnológica y de experiencia regulatoria para la construcción y operación de unidades de almacenamiento P2G. El proyecto, por tanto, supone un paso importante en la tecnología P2G de cara a implantarlo a gran escala.
Carlos Sánchez Criado
Publicista por la Universidad Complutense. Director comercial de publicaciones técnicas del sector de la energía durante doce años. Director de Energy News Events, S.L. desde 2012 difundiendo información en Energynews.es, movilidadelectrica.com e hidrogeno-verde.es. Y por supuesto, organizando eventos como VEM, la Feria del Vehículo Eléctrico de Madrid.