La producción de energía a partir de las olas tiene un potencial impresionante: el poder de las olas costeras en el mundo cada año equivale a toda la producción anual de electricidad global. Sin embargo, la extracción eficiente siempre ha sido un hándicap. Por ello, el potencial del prototipo de una nueva turbina, capaz de duplicar la energía obtenida de las olas.
Un equipo de investigación, dirigido por la Universidad Real Instituto de Tecnología de Melbourne (RMIT), ha creado la nueva turbina. Se trata de un convertidor de energía de las olas con una eficiencia que es dos veces mayor que cualquiera de las tecnologías utilizadas actualmente. Hemos hablado otras veces de estas tecnologías.
El potencial de la energía obtenida de las olas
Concretamente, se basa en un diseño de turbina dual pionero. Y del avance se ha hecho cargo la revista Apllied Energy.
Según ha explicado el investigador principal, el profesor Xu Wang, la energía obtenida de las olas es una de las más prometedoras, confiables y renovables. Además, ha afirmado:
“Si bien la energía eólica y solar dominan el mercado de las energías renovables, sólo están disponibles entre un 20 y un 30% del tiempo.
La energía de las olas está disponible el 90% del tiempo en promedio. Y la potencia potencial contenida en las olas en alta mar es inmensa.
Nuestra tecnología prototipo supera algunos de los desafíos técnicos clave que ha estado frenando a la industria de la energía de las olas para un despliegue a gran escala. Con un mayor desarrollo, esperamos que esta tecnología pueda ser la base para una nueva y próspera industria de energía renovable. Y que brinde enormes beneficios ambientales y económicos”.
Las tecnologías actuales y la nueva turbina
Uno de los enfoques experimentales más habituales es el de recolectar la energía de las olas mediante un “absorbedor puntual”. Es decir, un convertidor tipo boya, ideal para ubicaciones en alta mar.
Esta tecnología recolecta energía del movimiento ascendente y descendente de las olas. Generalmente, es rentable de fabricar e instalar.
Sin embargo, debe sincronizarse con precisión con el movimiento de las olas entrantes para recolectar la energía de manera eficiente. Esto, habitualmente, exige la incorporación de una serie de sensores, actuadores y procesadores de control. Todo ello agrega una complejidad al sistema que puede causar un rendimiento deficiente. Incluso, problemas de confiabilidad y mantenimiento.
El prototipo creado por RMIT no necesita tecnología de sincronización especial. El dispositivo flota naturalmente hacia arriba y hacia a bajo con el oleaje de la ola. Según explicaba Wang:
“Al estar siempre sincronizados con el movimiento de las olas, podemos maximizar la energía que se cosecha.
Combinando con nuestras exclusivas ruedas de turbina dual contrarrotantes, este prototipo puede duplicar la potencia de salida obtenida de las olas del océano, en comparación con otras tecnologías experimentales de absorción puntual”.
Eficiencia para la energía obtenida de las olas
Investigadores de ingeniería de RMIT han desarrollado este dispositivo simple y económico. Con ellos, han colaborado diversos investigadores de la Universidad de Beihang (China).
El sistema cuenta con dos ruedas de turbina, que se apilan una encima de otra y giran en dirección opuestas. Están conectadas a un generador a través de ejes, así como a un sistema de transmisión accionado por polea de correa.
El generador se coloca dentro de una boya, por encima de la línea de flotación. Así se mantiene fuera del agua del mar, corrosiva, por lo que se puede prolongar su vida útil.
Ya se ha probado con éxito el prototipo a escala de laboratorio. Por tanto, el equipo de investigación está dispuesto a colaborar con socios de la industria para probar el modelo a gran escala. Y, además, para trabajar en su viabilidad comercial. Al respecto, ha dicho Wang:
«Sabemos que funciona en nuestros laboratorios. Por ello, nuestros próximos pasos son escalar esta tecnología y probarla en un tanque o en condiciones reales del océano.
Aprovechar nuestro recurso de energía obtenida de las olas no sólo podría ayudar a reducir las emisiones de carbono y crear nuevos empleos de energía verde. Asimismo, tienen un gran potencial para abordar otros problemas ambientales. Por ejemplo, a medida que aumenta la frecuencia de la sequía, la energía de las olas podría utilizarse para alimentar plantas de desalinización neutras en carbono y suministra agua dulce para la industria agrícola. Por tanto, una adaptación inteligente al desafío de un clima cambiante”.
FUENTE: Europa Press.
Esther de Aragón es licenciada en Geografía e Historia. Lleva varias décadas trabajando para medios de comunicación de diferentes sectores. Además, es escritora y ha publicado libros de temática tan diversa como: guías de viaje, un libro sobre el vehículo eléctrico o una novela