EnergyNews entrevista a Carolina Probst, consejera de Agricultura y Medio Ambiente de la Embajada de la República Federal de Alemania en España, sobre la energía y el ambicioso proyecto alemán Energiewende. Para ella, lo primero que hay que cuestionarse es “cómo vivimos en este planeta y cómo consumimos, en otras palabras, ¿estamos dispuestos a atacar de raíz el cambio climático?”.
El «Energiewende» alemán es el proyecto de cambio energético más ambicioso de todos los países industrializados, y pretende que en 2050 el 80% de la generación de energía sea renovable.
¿Cuál es, en su opinión, el futuro a medio y largo plazo de la generación de energía en el mundo?
La población mundial crece vertiginosamente y con ella, las exigencias a los recursos limitados de nuestro planeta. Para los expertos, la respuesta estriba en un “transformative shift” de la economía mundial, lo cual significa que en el futuro el crecimiento de la economía y prosperidad por un lado y el consumo de energía y recursos por el otro tienen que seguir sendas distintas.
En Alemania se está llevando a la práctica en cierto modo un proyecto pionero mundial para ese cambio transformador con el cambio energético, porque va más allá de una innovación tecnológica y económica. Implica una transformación sustancial no solo de la generación de energía, sino también de las ciudades, de la mentalidad de los ciudadanos, del transporte, la industria y los hogares. El debate político evidencia hasta qué punto este cambio toca muchas fibras sensibles de la sociedad.
Cada semana se emiten varios debates en la televisión en los que participan personalidades relevantes de la política y la sociedad (pueden ser ministros federales, regionales, etc.) y expertos del sector que hablan de todos los temas relacionados con la energía, por ejemplo, de cómo transportar la electricidad proveniente de energías alternativas, sobre todo la eólica del norte, que tenemos que transportar al sur, donde está ubicada la gran industria. Muchos ciudadanos no quieren los tendidos eléctricos o molinos de viento cerca de sus casas, y eso se debate públicamente, al igual que todo lo relacionado con el medio ambiente, la lucha contra el cambio climático, cómo ahorrar en el consumo eléctrico y en qué medida la industria debe asumir parte del coste del cambio del modelo energético del país sin perder competitividad a nivel internacional. Y es que la transformación tan radical que pretendemos lograr en Alemania no sería posible si no hay una implicación y un fuerte apoyo por parte de la sociedad.
Pero volviendo a la pregunta, como conclusión, uno de los pilares del futuro son las tecnologías limpias y el otro son el ahorro y la eficiencia energética, porque por mucha energía renovable que introduzcamos en nuestro mix, su uso eficiente es fundamental.
¿Cuál debería ser el papel de las renovables en el mix energético europeo?
Desde el punto de vista económico, no todas las fuentes de energía renovable que existen son aptas para cada país. No obstante, prácticamente en cada país existen emplazamientos atractivos para alguna de ellas, en España tenéis el sol y en el norte de Alemania tenemos el viento. En vista del creciente aumento de los precios de la energía proveniente de los combustibles fósiles y el reto que plantea el cambio climático, las renovables adquieren cada vez más protagonismo.
Por eso, también estamos a favor de las interconexiones entre los países europeos y más allá de nuestras fronteras. En Alemania estamos interesados, por ejemplo, en el proyecto de Desertec, cuya filosofía es producir electricidad allí donde la hay, como es el caso del desierto de Argelia, donde se podría aprovechar la radiación solar, pero para ello es necesario que España esté conectada con el resto de Europa y deje de ser una isla energética. También otros países del Mediterráneo podrían ser parte de una gran familia de energía eléctrica.
¿Qué opinas sobre la generación distribuida? ¿tendemos a generar nuestra propia energía?
Creo que lo mejor es disponer de una mezcla equilibrada entre una generación propia, a pequeña escala, para el uso en los hogares y energía producida a nivel industrial para las grandes empresas. Las renovables disponen del potencial para abastecer de energía de forma descentralizada lejos de las redes públicas, y también para abastecer de agua potable a regiones con escasez de agua.
El Energiewende alemán, ¿ejemplo para Europa?
Nosotros no queremos aleccionar, pero sí queremos ilusionar, crear entusiasmo y curiosidad en toda la sociedad y tener repercusión más allá de las fronteras nacionales.
Queremos configurar y trasladar el proyecto de Energiewende de tal manera que no solo funcione en nuestro propio país, sino que resulte atractivo y extrapolable a nivel mundial. Queremos que opere como señal de cara a otros países, sobre todo los emergentes: el crecimiento económico y la protección del medio ambiente no se excluyen recíprocamente. Queremos mostrar alternativas al uso de la energía nuclear y alentar a otros países a seguir este camino, porque conlleva dos grandes riesgos: el riesgo en sí de que ocurra un accidente como Fukushima y la gestión de residuos radiactivos. En Alemania estamos cerrando las centrales -en 2022 cerraremos la última- y su desmantelamiento está provocando grandes problemas. Uno de los almacenamientos subterráneos, el Asse, está teniendo filtraciones de agua, y el escape de residuos radiactivos de baja y media actividad podría provocar un desastre durante cientos de años.
Otras buenas razones para cambiar a un sistema energético sostenible son:
1.- Los recursos fósiles son limitados y su precio aumentará tarde o temprano. La demanda energética se incrementa constantemente.
2.- Las renovables ganan en competitividad y ofrecen junto con la eficiencia energética buenas oportunidades de negocio y son motores de la investigación e innovación.
3.- Las emisiones de CO2 contribuyen al calentamiento global, incluso si se somete a debate la imperfección de los modelos climáticos.
Por eso mantengo la convicción de que la energía nuclear no es una solución de futuro. Pero Alemania y Europa no pueden lograr el cambio por sí solas. Países emergentes como China, Brasil o la India no solo se cuentan entre los mayores emisores de CO2, sino que también tienen una gran influencia sobre la política climática y energética internacional.
El mundo observa con atención si los alemanes logramos sacar adelante el cambio energético porque la transformación está por llegar en todas partes, como China y la India, que hoy por hoy se encuentran en el umbral de la era industrial. En Shangai o Nueva Delhi de hecho ya hoy mismo muchas veces no se ve ni un palmo por culpa de la contaminación atmosférica. Y también han de adaptarse aquellas economías que no tengan la certeza de que van a poder seguir basándose exclusivamente en la explotación de sus propias reservas de materias primas dentro de veinte o treinta años.
Nuestro propósito es impulsar nuevas asociaciones internacionales en materia de política energética y medio ambiente. Así, por una parte, podemos ayudar a los países emergentes a saciar su apetito de energía con menos carbón, menos petróleo y menos energía nuclear, pero a la vez de manera eficiente en términos de costes. Y por otra, dichas asociaciones ayudarán al éxito del cambio energético en nuestro país.
Dentro de Europa Alemania tiene lazos con sus vecinos a través de redes eléctricas transfronterizas múltiples. De hecho, somos exportadores netos de energía con las interconexiones a nuestros países vecinos. No queremos ni podemos implementar la transición solos. Por eso coordinamos constantemente nuestras medidas con nuestros vecinos, las debatimos en la UE y tenemos toda una serie de proyectos comunes.
¿Cómo ve Alemania los cambios legislativos españoles?
Es importante que Europa siga una ambiciosa estrategia climática y energética. No obstante, la decisión acerca del mix energético nacional así como su financiación y sistema de subvenciones queda básicamente en el área de competencias de los estados miembros.
Carlos Sánchez Criado
Publicista por la Universidad Complutense. Director comercial de publicaciones técnicas del sector de la energía durante doce años. Director de Energy News Events, S.L. desde 2012 difundiendo información en Energynews.es, movilidadelectrica.com e hidrogeno-verde.es. Y por supuesto, organizando eventos como VEM, la Feria del Vehículo Eléctrico de Madrid.