Solo falta el visto bueno del Consejo de Ministros para que se apruebe el Real Decreto que calcula la tasa de rentabilidad para la renovables. Si se aprueba sin cambios, las instalaciones de antes del año 2013 mantendrán su actual tasa del 7,39%, mientras que para las posteriores será del 7,09%.
El objetivo del Real Decreto que calcula la tasa de rentabilidad para las renovables es evitar que se produzcan más arbitrajes por esta causa.
A día de hoy, en Europa permanecen abiertos un total de 42 litigios por los que se reclaman a España 1.000 millones de euros. De los 12 laudos emitidos por estos procedimientos el Estado ha perdido diez, con una factura por indemnizaciones que se eleva a 821 millones de euros.
A este respecto, el diario La Vanguardia recoge declaraciones del gobierno en las que se afirman que, de momento, no se ha abonado un euro y que el pago depende de la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado. También que desde que el Gobierno anunciara que iba a buscar una solución no se han interpuesto nuevas demandas.
Las plantas que quieran mantener la rentabilidad durante 12 años se comprometen a renunciar a presentar demandas judiciales, incluso si ya habían abierto un pleito deben dar marcha atrás y retirarlo
El Real Decreto sobre la tasa de rentabilidad para las renovables que será sometido a votación en Consejo de Ministros establece diferentes valores en función de la fecha de arranque de las instalaciones:
- las anteriores a 2013 mantendrán un 7,39%
- para las posteriores a 2013 la tasa de rentabilidad de mantendrán en un 7,09%
Por qué es necesario regular la tasa de rentabilidad para las renovables
El Gobierno busca aprobar el Real Decreto con la nueva tasa de rentabilidad para las renovables con el fin de evitar que se produzcan más arbitrajes.
El descontento de las empresas responsables de la explotación y gestión de instalación renovables tiene su origen en el tijeretazo de 2013.
Fue el último gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero quien inicio el recorte de las ayudas a las energías renovables. Pero fue el primer Gobierno de Mariano Rajoy quien ejecutó la reforma energética que ha dado lugar a todas las demandas. El equipo del entonces ministro de Industria, José Manuel Soria, eliminó el sistema de ayudas verdes (que concedía subvenciones en función de la energía que se producía). El resultado fue un ahorro de unos 1.700 millones de euros al año.
Los recortes provocaron un aluvión de demandas por parte de inversores que contaban con las ayudas del Estado español durante 25 años.
Si se aprueba el Real Decreto, las instalaciones de antes del 2013 podrán elegir entre garantizarse la rentabilidad del 7,39% hasta el 2031 renunciando a pleitear u optar por la nueva retribución del 7,1% hasta el 2021 y mantener la posibilidad de reclamar compensaciones.
Periodista de cuándo se maquetaba con tipómetro (no, no hace tanto...). Toda una vida dedicada a escribir sobre energía y acerca de cómo la movilidad cambia (para bien) la vida de las personas.