El interés que ha despertado la subasta de renovables, que se celebra mañana, ha sido enorme. Más de 150 compañías se han inscrito para participar y optar por una parte de los 3.000 megavatios de potencia verde lanzado por MITECO. De ellos, al menos 1.000 MW corresponderán a fotovoltaica; otros 1.000 a eólica terrestre; y el resto quedará sin restricción tecnológica.
Esta subasta es la segunda que se celebra desde 2017. Con ella, se abre el calendario de 19,44 GW de potencia renovable que ha previsto el Ministerio para la Transición Ecológica (MITECO) hasta 2025: 8.500 MW de eólica; 10.000 MW de fotovoltaica; 500 MW termosolar; 380 MW de biomasa; 60 MW de diferentes tecnologías.
El propio PNIEC contempla la instalación de 60 Gigavatios (GW) renovables en la próxima década. Además, el Gobierno espera que estas cifras ayuden, aunque no sea a corto plazo, a reducir la factura de la luz.
Subastas de 2017
En 2017 se celebraron dos subastas: una en julio y otra en mayo. En la de julio, se adjudicaron más de 5.000 megavatios; de ellos, 3.909 megavatios fueron para instalaciones fotovoltaicas y 1.128 megavatios para eólicas, repartidos entre cerca de cuarenta empresas. Mientras, en la de mayo, se subastaron otros 3.000 megavatios.
La suma de los megavatios de ambas subastas ha entrado en la red en los últimos dos años (principalmente a finales de 2019). Han ayudado a impulsar la presencia de las energías renovables en el ‘mix’ eléctrico.
Condiciones de la actual subasta de renovables
Esta subasta de renovables ha generado un interés enorme entre las compañías del sector. La subasta está abierta a instalaciones nuevas, pero también a las existentes en el sistema eléctrico peninsular que vayan a realizar una ampliación. En el caso de disponer de sistema de almacenamiento, estas últimas, será para almacenar la energía generada en la instalación
El plazo de entrega se extiende, como fecha límite, hasta los 12 años o 15 años. 12 para las tecnologías fotovoltaica, solar termoeléctrica, eólica terrestre y marina e hidroeléctrica; 15 para las de biomasa, biogás y biolíquidos.
La principal novedad de esta subasta es que no se pagará a los adjudicatarios el precio marginal, sino el precio que pida cada inversor (pay-as-bid). Las pujas se realizarán sobre el precio que se exige por la energía producida y el volumen de producto adjudicado a una misma empresa o grupo empresarial. Además, no podrá sobrepasar el 50% del cupo del producto (1.500 MW).
Otras exigencias
Además, los participantes en la actual subasta están obligados a presentar un plan estratégico con el impacto estimado en el empleo local y en la cadena de valor industrial, tanto local, como regional y nacional. Asimismo, un plan de economía circular, con el tratamiento de los equipos al final de su vida útil y el análisis de la huella de carbono durante el ciclo de vida.
Inquietud por la puja
Las grandes compañías temen que empresas como Forestalia, Capital Energy y otros nuevos entrantes pujen en la subasta con ofertas “temerarias”. Es decir, y para la fotovoltaica, por debajo de los 30 euros MWh. Eso podría suponer un problema para el mercado de las PPA, a largo plazo. Los precios, dependiendo de la duración de acuerdo, así como de otros conceptos, ronda ya los 35 euros.
Sin embargo, otros entienden que las subastas son un mecanismo necesario para desarrollar el proceso de descarbonización de la economía, promovido desde MITECO. Además, se da acceso a promotores que cuentan con poca potencia de renovables y que no tienen un parque de generación suficiente.
Compañías presentes en la subasta de renovables
Hasta 150 compañías se han inscrito en la subasta de renovables de mañana. Entre ellas, empresas como Endesa, Naturgy, Iberdrola o Acciona; también se incorpora Repsol. Otras, como Cepsa, han decidido no intervenir.
Indica Europa Press que era previsible la participación de grandes eléctricas y grupos de energías verdes. Y eso que las grandes energéticas han afirmado varias veces que no lo necesitan para crecer en renovables.
Algunas de ellas, ven la subasta como un vehículo para desarrollar su estrategia de renovables, como es el caso de Naturgy. Por su parte, Acciona se ha inscrito siguiendo su objetivo de seguir teniendo un papel importante en el impulso de las energías verdes para la transición.
Además de éstas, pujarán las que se dieron a conocer en las anteriores subastas, como Forestalia; igualmente, nuevos jugadores que han llegado con fuerza al mercado de las renovables, como Repsol.
Tampoco se descarta la entrada de otros actores con fuertes planes de crecimiento en renovables, o de desarrolladores; incluso de jugadores extranjeros aprovechando la fuerte apuesta por las renovables que está llevando a cabo nuestro país.
FUENTES: Europa Press, El Mundo, Cinco Días, Expansión, El Peródico.
Esther de Aragón es licenciada en Geografía e Historia. Lleva varias décadas trabajando para medios de comunicación de diferentes sectores. Además, es escritora y ha publicado libros de temática tan diversa como: guías de viaje, un libro sobre el vehículo eléctrico o una novela