Por Laura Ojea
Siempre se ha dicho que las comparaciones son odiosas. Pero si es para tener una referencia de lo que los españoles pagamos por el recibo de la luz, bienvenidas sean. Según datos de la Agencia Internacional de la Energía (IEA) y del Osinergmin, el Organismo de Inversión en Energía de Perú, estamos entre los primeros más caros del ranking a paridad de poder adquisitivo (PPA).
Hace unos meses Eurostat publicaba un informe en el que se comparaban los precios de las facturas de la luz de los consumidores domésticos de los distintos países europeos. Por su parte, el Osinergmin, Organismo Supervisor de la Inversión en Energía y Minería de Perú, hacía lo propio comparando el precio de la electricidad con los países de América el Sur.
Pero, ¿dónde está la electricidad más cara y dónde es más barata? O mejor aún, ¿cómo saber si el esfuerzo que hace un español para pagar la electricidad resulta superior en función de su renta per cápita? Para saberlo, hay que tomar en cuenta el precio relativo de la electricidad, recogiendo los precios medios de la electricidad de diferentes países y de un tramo de consumidores (residencial, industrial o grandes consumidores) y unificarlos bajo la misma medida, el kWh.
Comparativa entre países europeos
En 2013, los españoles domésticos pagamos muy cara la energía y sobre todo si esos precios se calculan a paridad de poder adquisitivo entre nuestros vecinos europeos. Si observamos el gráfico de Anae (la Asociación Nacional de Ahorro y Eficiencia Energética), el esfuerzo del consumidor doméstico español, (35,8%), solo es superado por cuatro países (Bosnia, Chipre, Albania y Eslovaquia), pero estamos lejos, muy lejos, de países con una renta per cápita muy superior a la nuestra, como Reino Unido, Francia o Alemania.
Comparativa entre países latinoamericanos
Según Osinergmin, en Latinoamérica la tarifa más económica es la venezolana y asegura que es porque el Estado subvenciona su precio para que se abarate, como ocurre con Argentina y Paraguay. Entre las tarifas más caras, se encuentra Uruguay, porque la empresa pública Administración Nacional de Usinas y Transmisiones Eléctricas ejerce en la práctica el monopolio de la transmisión y distribución.
Y, ¿dónde está la más barata?
Todos sabemos que con un dólar estadounidense o un euro, por ejemplo, no se pueden compran los mismos bienes y servicios en un país como India o en otro como Australia.
Por eso, la organización independiente de investigación Shrink That Footprint, a mismo nivel de poder adquisitivo, realizó en 2011 un estudio comparativo entre una muestra de 17 países de todo el mundo y llegó a la conclusión de que la electricidad canadiense es la más barata, con tan solo 10 céntavos de dólar por kilovatio-hora, seguido de Estados Unidos (0,12 $/kWh) y de la India y China.
Y esto es así porque aunque haya países que sus hogares paguen menos de esa cantidad por el kWh, Canadá ocupa los primeros puestos del ranking de países del mundo ordenados según su producto interno bruto (PIB) a valores de paridad de poder adquisitivo (PPA) per cápita, o lo que es lo mismo, a sus ciudadanos les pesa menos rascarse el bolsillo para pagar el recibo de la luz porque todavía les queda mucho dinero para destinar a otros gastos.
En el caso de Venezuela, tiene la tarifa de electricidad más barata de los países de su entorno para un consumidor residencial, alcanzando los 0,0028 $/kWh (0.002 €/kWh) lo que le sitúa en unos precios muy por debajo de los europeos. Y aún más si comparamos la renta per cápita del país (12.729 dólares) y la del estado de Macedonia con tan solo una renta per cápita de 4.565 dólares. Lo mismo ocurre con Brasil respecto a España. Pagamos tres veces más por el kWh, (0,17 €/kWh) pero nuestra renta per cápita solo es un poco más del doble de la de los ciudadanos brasileños, 28.274 dólares y 11.340 dólares respectivamente.
Los más perjudicados sin duda, son los consumidores domésticos de Uruguay, y especialmente El Salvador y Guatemala. En el caso del primer país, con la mitad de la renta per cápita de la de los españoles, pagan muy cara su electricidad, a 0,1955 €/kWh, pero en los otros dos países centroamericanos, aún es más dramático. Su renta per cápita se reduce a 3.790 dólares y 3.331 dólares respectivamente, pero el precio del kWh es muy similar al que se paga en España.
Carlos Sánchez Criado
Publicista por la Universidad Complutense. Director comercial de publicaciones técnicas del sector de la energía durante doce años. Director de Energy News Events, S.L. desde 2012 difundiendo información en Energynews.es, movilidadelectrica.com e hidrogeno-verde.es. Y por supuesto, organizando eventos como VEM, la Feria del Vehículo Eléctrico de Madrid.