El gobierno de Obama ha aprobado la autorización final para que se comience con el programa de perforación del Ártico de la petrolera Shell. Se despeja así el camino para que la empresa reinicie su búsqueda de petróleo en las gélidas aguas del norte. Según ha anunciado la empresa, se extremarán las medidas de seguridad para evitar incidentes en este medio natural tan frágil.
Todo está ya a punto. De nada han servido las protestas de organizaciones ecologistas y ciudadanas en contra de perforar el subsuelo ártico. Sin embargo, los expertos auguran que, pese a que Obama ha dado luz verde a Shell, una Casa Blanca con Hillary Clinton al frente podría negar ese permiso a Shell, incluso si se confirma su sospecha de que el Ártico estadounidense alberga grandes reservas de petróleo.
Y esto es así porque la pasada semana, la líder de los demócratas y principal candidata a sustituir a Barack Obama se pronunció en contra de la decisión del presidente norteamericano, diciendo que el programa de Shell era una apuesta muy arriesgada. «El Ártico es un tesoro único«, escribió ella en respuesta a la aprobación realizada por la Oficina de Seguridad y Control Ambiental (BSEE) de EEUU. «Dado lo que sabemos, no vale la pena el riesgo de perforar«.
El buque Fennica
Mientras tanto, la petrolera Shell ha estado esperando desde inicios de este mes para que llegara el buque Fennica, especializado y con un dispositivo diseñado para controlar un reventón, después de haber sufrido daños en la ruta hacia el mar de Chukchi. Las normas de seguridad en el Ártico prohíben la perforación profunda que pudiera producir un vertido del crudo.
El director de la BSEE Brian Salerno anunció que la llegada de esta embarcación de alta seguridad supone que la compañía cumple con «las normas de más alta seguridad, protección del medio ambiente y de respuesta de emergencia«. Sin embargo, esta entidad “seguirá vigilando el trabajo de Shell día y noche para garantizar la máxima seguridad y cuidado del medio ambiente«.
Una portavoz de Shell también anunció que la compañía sigue adelante con su programa en la plataforma Polar Pioneer, donde se ha hecho algunas perforaciones en «zonas de apoyo de hidrocarburos» del Ártico, en el lecho rocoso del océano.
«Seguimos comprometidos a operar de una manera segura, ambientalmente responsable y con ganas de evaluar lo que potencialmente podría convertirse en una base nacional de recursos de energía«, dijo.
Oposición de los ecologistas
Las prospecciones se encuentran a 112 km de la costa de Alaska. Los ambientalistas y observadores han expresado su preocupación por la posibilidad de que haya un gran derrame en el frágil medio natural del Ártico, y sobre todo por la posibilidad de que se pudiera recuperar todo el aceite. El agua fría no es compatible con los microorganismos que rompieron el aceite en Macondo, el masivo derrame de BP en las aguas más cálidas del Golfo de México en 2010. El aceite podría quedar atrapado bajo el hielo marino que cubre el área la mayor parte del año, por lo que los expertos creen que la posibilidad de limpieza es remota.
Organizaciones ecologistas como Greenpeace han denunciado la postura de Obama, que quiere enarbolar la lucha contra el cambio climático mientras aprueba nuevas perforaciones de combustibles fósiles. “Aprueba leyes para frenar las emisiones de CO2 de las centrales eléctricas y viaja a Alaska para visitar comunidades afectadas por el cambio climático, precisamente a las que está sacrificando en beneficio de Shell”, denunciaba la activista de Amigos de la Tierra Marissa Knodel.
El director ejecutivo de Greenpeace EEUU Annie Leonard definió de “profundamente hipócrita” al presidente ya que “no puede tener las dos cosas. Anuncia una gira de Alaska para hablar de cambio climático justo antes de dar la aprobación definitiva de Shell para perforar en el océano Ártico«.
Carlos Sánchez Criado
Publicista por la Universidad Complutense. Director comercial de publicaciones técnicas del sector de la energía durante doce años. Director de Energy News Events, S.L. desde 2012 difundiendo información en Energynews.es, movilidadelectrica.com e hidrogeno-verde.es. Y por supuesto, organizando eventos como VEM, la Feria del Vehículo Eléctrico de Madrid.