Hablábamos ayer del programa “Mujer e Ingeniería” gracias a la entrevista que realizamos a Carmen Becerril, presidenta de AEMENER. Hemos querido conocer el programa a través de su directora, Sara Gómez. Asimismo, la problemática con respecto a la mujer y los estudios STEM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas).
Para ello, hemos hablado con Sara Gómez, directora del programa “Mujer e Ingeniería”, ingeniera Industrial y consejera de la Real Academia de Ingeniería. Le hemos pedido que nos explique un poco el porqué del proyecto, su objetivo, el papel de la mujer…
-¿Cuál es el fin de “Mujer e Ingeniería”?
-El objetivo de nuestro proyecto es poner en valor la ingeniería y revertir la situación que existe a nivel mundial, donde España no es una excepción. Las escuelas de Ingeniería están perdiendo ingenieros desde hace más de 15 años, y la situación se agrava si nos centramos en la mujer.
-¿Por qué los jóvenes no estudian carreras de ingeniería?
-Las causas son varias. Por citar algunas, el gran desconocimiento que existe, los enormes estereotipos que hay alrededor de la ingeniería, incluso la falta de referentes con suficiente visibilidad.
-En el caso de la mujer y la energía, ¿Cree que un programa como Mujer e Ingeniería tendrá una respuesta rápida?
-Las acciones que desde M&I llevamos realizando desde octubre de 2016, dirigidas a las ingenieras recién egresadas, está siendo un éxito rotundo para mentoras y mentees. Es un verdadero lujo y un placer escuchar las experiencias que están viviendo unas y otras. Les invito a que les trasladen esta pregunta, merece la pena.
Además, con la experiencia del camino recorrido y los programas de apoyo que hacemos en M&I, estoy convencida de que esta acción dirigida especialmente a las recién egresadas con intereses en el sector energético, tendrán una respuesta excepcional y a corto plazo.
-¿Habrá que vencer muchos estereotipos, en su opinión, para que la mujer tenga una mayor representación en la evolución tecnológica?
-El problema es estructural, grande y complejo, por tanto su solución tiene que estar a la altura. Deberíamos dar algunas claves en esa línea.
En primer lugar, hemos de romper estereotipos, mostrándoles la realidad. Poniendo en valor y sacando a la luz los estupendos referentes femeninos que hemos tenido y tenemos en ingeniería. En segundo lugar, cambiar la percepción de materias como matemáticas o física desde edades tempranas. La mala fama de estas asignaturas hace que muchas niñas abandonen la idea de desarrollar su vida profesional en estudios STEM.
Además, tenemos que hacer visible la gran vertiente social que tienen las ciencias y la ingeniería.
Pero sobre todo, haciéndoles ver que la ingeniería es la punta de lanza del progreso y la mejor palanca para hacer un mundo más justo, más humano y más sostenible.
-¿Cree que está un poco olvidado el papel de la madre como educadora, de cara a procurar la sostenibilidad del planeta?-No tengo una respuesta rotunda a esta pregunta, como tampoco creo que en este tema haya o deba haber un reparto de papeles distinto para madres y padres. Leía en una publicación de la plataforma “Gestionando hijos” de la Fundación sm un artículo dedicado a educar en valores. Defendía que la educación es cosa de TODOS, madres, padres y profesores, comparto completamente esta idea.
Todos debemos estar alineados, con un objetivo común, si realmente nos creemos que hay que mejorar el mundo en el que vivimos, que tenemos que trabajar por y para las personas y que es nuestra responsabilidad hacer lo necesario para que el planeta sea sostenible.
La Asamblea General de la ONU adoptó el 25 de septiembre de 2015, la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible. Un plan de acción en favor de las personas, del planeta y la prosperidad. Esta agenda apunta un camino bien distinto al que llevamos. Propone un cambio radical de trayectoria para lograr los desafíos claramente definidos en los 17 objetivos de desarrollo sostenible. Y pone el foco en lo mucho que la ciencia, la tecnología, la ingeniería y la innovación pueden hacer por las personas y por el planeta.
Para conseguir estos objetivos, en mi opinión, la palanca más poderosa es la educación. Es formar a las futuras generaciones como ciudadanos preparados, comprometidos, responsables y libres.
-¿Cree que algún día llegaremos a vernos como seres humanos, técnicos y especializados en la disciplina que sea, sin necesidad de distinguirnos como hombres o mujeres?-Para eso estamos trabajando desde Mujer e Ingeniería, estamos viviendo un cambio social que cambiará la vida de las personas y el futuro del planeta. Realmente creo que estamos viviendo en una GRAN revolución que tiene mucho que ver con el quinto objetivo de desarrollo sostenible. “La igualdad de género y el empoderamiento de la mujer”.
Solo la igualdad efectiva entre hombres y mujeres hará un mundo más justo, más humano y sostenible. Con esta rotundidad lo siento, lo pienso y lo expreso.
Esther de Aragón es licenciada en Geografía e Historia. Lleva varias décadas trabajando para medios de comunicación de diferentes sectores. Además, es escritora y ha publicado libros de temática tan diversa como: guías de viaje, un libro sobre el vehículo eléctrico o una novela
No creo que sea una casualidad que el término «ingeniería» sea de género femenino … más bien creo que es una premonición … la ingeniería en el futuro próximo va a estar comandada mayoritariamente por mujeres, como ya ocurre hoy en día con la Calidad … la mente de la mujer tiene dotes y habilidades adicionales que favorecen su éxito en el sector de la ingeniería, meticulosidad, curiosidad y previsión les ayudan.
El futuro de la ingeniería estará en las manos de la mujer.
¿Por qué los jóvenes no estudian carreras de ingeniería?
Se te olvida el principal: porque un reponedor del Mercadona, cuando entra a trabajar dobla el sueldo a un Ingeniero ¿no podrá ser esta una causa?