ha informado de su resultado neto ajustado durante los nueve primeros meses del año. Este resultado, que mide específicamente el desempeño de los negocios, ha sido de 196 millones de euros. Los datos reflejan el difícil entorno, provocado por la pandemia. A pesar de ello, la compañía ha tenido una generación de caja operativa positiva y ha reducido deuda neta.
El contexto para Repsol ha sido muy complicado por: la crisis sanitaria global; la drástica caída de los precios del crudo y del gas; y el colapso de la demanda.
A pesar de todo, la compañía explica que ha conseguido mejorar en 265 millones de euros el resultado neto ajustado del segundo trimestre del año. Y entre las causas de la mejora, principalmente, la puesta en marcha en marzo del Plan de Resiliencia.
La situación generada por el COVID-19 incidió de manera brusca en los precios del crudo y el gas. Durante los primeros meses del año, sufrieron fuertes caídas. Especialmente, durante el segundo trimestre, donde la demanda mundial padeció el mayor derrumbe de la historia.
La valoración de inventarios de Repsol sufrió el descenso de las cotizaciones de las materias primas de referencia. Concretamente, esa valoración descendió en -1.048 millones de euros para el periodo. Además, la compañía revisó sus hipótesis de precios futuros del crudo y del gas y ajustó a la baja el valor de activos de Upstream. Todo ello fue fundamental para que los resultados específicos se situasen en -1.726 millones. Y llevó el resultado neto de los nueve primeros meses de 2020 a -2.578 millones de euros.
Plan de Resiliencia
En marzo, Repsol puso en marcha el Plan de Resiliencia, como respuesta a la crisis. Establece una serie de medidas que están resultando eficaces para reforzar la generación de caja y fortalecer el balance. Asimismo, para reducir de forma progresiva la deuda neta. También actúa sobre costes operativos e inversiones.
A finales del tercer trimestre, la consecución de objetivos ha permitido a Repsol revisar los objetivos del año. En consecuencia, y con respecto a lo presupuestado a comienzos de años, han aumentado: la estimación inicial de reducción adicional de los gastos operativos hasta los 500 millones de euros; el recorte de las inversiones hasta los 1.200 millones; y la optimización del capital circulante en cerca de 700 millones de euros.
A cierre del tercer trimestre, Repsol: había conseguido reducir los gastos operativos en más de 350 millones de euros; además, optimizado el capital circulante en más de 400 millones; asimismo, reducido su deuda neta en 882 millones de euros, respecto a 31 de diciembre de 2019, situándose en 3.338 millones.
En lo que llevamos de ejercicio, Repsol ha realizado cinco emisiones de bonos por un total de 3.850 millones de euros. De ellos, 1.500 millones corresponden a bonos perpetuos subordinados, que fortalecen su patrimonio, además de su liquidez. La demanda superó a la oferta en todas estas emisiones.
Igualmente, se incrementaron las líneas de crédito comprometidas y no utilizadas en 1.605 millones de euros.
La liquidez se situó en 9.099 millones de euros a final de septiembre, lo que cubre en 3,43 veces los vencimientos a corto plazo; la cifra también se incrementa respecto al trimestre anterior.
Descarbonización y de generación renovable
El negocio de Comercial y Renovables obtuvo un resultado de 332 millones de euros en los primeros nueve meses del año. Se vio penalizado por el desplome en la demanda provocado por la pandemia, que afectó a todos sus segmentos.
Sin embargo, entre julio y septiembre, la compañía consiguió un resultado de 169 millones, superior al del segundo trimestre; incluso, superior al del mismo periodo del año pasado.
Área de Electricidad y Gas
Esta área, con 1,1 millón de clientes, siguió desarrollando alternativas de autoconsumo. En esa línea, Solify y Solmatch, la primera gran comunidad solar de España. En abril, lanzaron Solmatch, que fomenta la generación distribuida y el consumo de energía local y 100% renovable.
Generación renovable
En su objetivo de alcanzar las cero emisiones netas en 2050, la compañía ha dado nuevos pasos.
- El más reciente, la conexión a la red de los primeros aerogeneradores de Delta, uno de sus proyectos eólicos ubicados en Aragón. Entrará en operación comercial a finales de año.
- En abril, la compañía inició las obras de construcción de su primer parque fotovoltaico, ubicado en Ciudad Real. En julio, comenzó el montaje del segundo parque, situado en Badajoz. Además, está desarrollando otros parques eólicos entre Huesca, Zaragoza y Teruel; otro entre Palencia y Valladolid; y otro en Cádiz.
- En cuanto a su expansión internacional en renovables, cerró un acuerdo con el Grupo Ibereólica Renovables. Ese acuerdo le da acceso a una cartera de proyectos en Chile que dicha compañía tiene en operación, construcción o desarrollo.
Negocio Industrial de Repsol
Repsol ha presentado diferentes proyectos para 2020, en relación con este negocio. Además, ha trabajado para para adaptar sus esquemas de producción, logísticos y comerciales al contexto internacional, sin perder el foco en la innovación y la digitalización. Con todo ello, el negocio Industrial obtuvo un resultado de 229 millones de euros entre enero y septiembre.
- La compañía anunció recientemente la construcción en su refinería de Cartagena de la primera planta de producción de biocombustibles avanzados de España. Asimismo, dos proyectos de los que hablamos hace unos meses, relacionados con la producción de combustibles sintéticos a partir de hidrógeno renovable y con la producción de gas a partir de residuos urbanos.
- Por otra parte, Repsol completó con éxito a principios de agosto la fabricación del primer lote de biocombustible para aviación del mercado español.
- En cuanto al negocio químico, también se vio afectado por la pandemia. En contrapartida, puso en marcha como la primera planta de la Península Ibérica para la fabricación de polímeros de alta resistencia al impacto.
- Y en cuanto al negocio de Upstream, el COVID hizo que tuviese un resultado operativo neutro y generase 1.308 millones de euros de caja operativa. Además, redujo la producción de algunos activos, con una media de 655.000 barriles equivalentes de petróleo al día, entre enero y septiembre. Y, aunque también se redujo la actividad exploratoria, hicieron otros hallazgos en EEUU, Colombia y México.
Esther de Aragón es licenciada en Geografía e Historia. Lleva varias décadas trabajando para medios de comunicación de diferentes sectores. Además, es escritora y ha publicado libros de temática tan diversa como: guías de viaje, un libro sobre el vehículo eléctrico o una novela