Hay veces que es necesario pensar cómo sería nuestra realidad si alguna de las características que tenemos actualmente fuera un poco diferente. Por eso, os propongo hacer un poco de ciencia ficción e imaginar que hubiera energía solar fotovoltaica en todos los edificios de nuestras ciudades. ¿Os habéis preguntado alguna vez que pasaría si eso fuera una realidad?
Imaginaos que, durante el siglo XX, en lugar de concentrar todo el sector eléctrico en grandes centrales en manos de unas pocas empresas, se hubiera decidido que cada edificio fuera una fuente de generación de energía eléctrica o pensad que eso puede ocurrir en el futuro.
Lo primero que se me ocurre es que, como la energía solar fotovoltaica sería un elemento de gran consumo, se invertiría bastante dinero, público y privado, en su mejora y eficiencia, logrando rendimientos muy altos en la conversión de los rayos del sol en electricidad.
Imaginad también que, además, se investigó desde hace tiempo adecuadamente en el desarrollo de baterías de almacenamiento eléctrico, con lo que éstas serían muy eficientes, tanto energéticamente como económicamente.
Tener energía solar fotovoltaica en todos y cada uno de los edificios de nuestras poblaciones, con o sin estas maravillosas baterías, tendría muchas consecuencias y cambiaría mucho nuestro modo de pensar y de comprar la energía eléctrica.
Primero porque los propietarios de los edificios serían titulares también de esas pequeñas instalaciones de generación eléctrica, por lo cual, estarían (estaríamos) ocupados en que éstas funcionaran bien y se hicieran correctamente para conseguir una mejor calidad y estabilidad de la energía y a un menor coste.
Además, necesitaríamos muchas menos centrales grandes para abastecernos, ya que la mayoría de energía que se produciría estaría muy cerca del consumo. Esto acarrearía también muchas menos infraestructuras y cables por nuestro territorio trayendo un beneficio medioambiental y paisajístico considerable a parte de un coste de la electricidad muy bajo al no tener que mantener estas instalaciones y al tener poca demanda de la misma.
Tener fotovoltaica en tejados propiciaría que la generación eléctrica tuviera que estar integrada en la arquitectura, no usando grandes bienes naturales para producirla, y propiciando, a su vez, diseño y arte en las centrales de generación.
Seríamos más conscientes de nuestro consumo energético para intentar no comprar a otros su electricidad ya que la que no es generada por nuestras instalaciones sería más cara. Eso posibilitaría que se desarrollaran más sistemas de ahorro energético y, sobre todo, el uso de estas ideales baterías de almacenamiento o pilas de combustible de las que hemos hablado antes, para intentar ser autosuficientes.
Cargaríamos nuestros coches eléctricos, que ya estarían plenamente desarrollados gracias a las baterías, en nuestras casas, haciendo de este tipo de vehículos el medio de transporte más limpio entre los que van a motor.
El negocio eléctrico, y parte del energético en general, sería propiedad de todos, por lo que no habría grandes empresas eléctricas que presionarían a los gobiernos en busca de un beneficio a corto plazo para ellas, perjudicando, si fuera necesario, a la ciudadanía.
No se harían más guerras por motivos energéticos, porque también se desarrollarían sistemas de generación de calor mediante electricidad renovable y porque todos los países tendrían casi totalmente abastecida su energía, pudiendo llegar sin problemas de costes ni abastecimiento a los lugares más remotos.
En fin, yo solo imagino cosas buenas con energía solar fotovoltaica en edificios, en todos los edificios, que espero algún día, si bien no todos, sí un gran porcentaje de los mismo se abastezcan mediante energía solar. Estamos en el camino, cada vez hay más gente investigando en la mejora de paneles y baterías y normativas que abogan por edificios de consumo energético casi nulo, por lo que, seguramente, podremos ver, nosotros o nuestros hijos, este deseo hecho realidad.
Una opinión de Isaac Torregrosa
CEO de Quetzal Ingeniería
Carlos Sánchez Criado
Publicista por la Universidad Complutense. Director comercial de publicaciones técnicas del sector de la energía durante doce años. Director de Energy News Events, S.L. desde 2012 difundiendo información en Energynews.es, movilidadelectrica.com e hidrogeno-verde.es. Y por supuesto, organizando eventos como VEM, la Feria del Vehículo Eléctrico de Madrid.
Pues algo parecido me imaginé hace seis años. Por cierto ASIF acertaba en el año 2015 para llegar a la paridad.
http://renovablessinlimites.blogspot.com.es/2009/08/nos-pelearemos-por-los-tejados.html