Hace unas semanas, diferentes medios de comunicación se hicieron eco de los cinco millones de neumáticos que están amontonados desde hace más de diez años en la Comunidad de Madrid, más concretamente, en 9,8 hectáreas frente al municipio de Seseña. Pero, ¿cómo deshacerse de ellos? La industria cementera ofrece la opción del combustible pero también existen otras posibilidades.
Las casi 100.000 toneladas de ruedas usadas que están abandonadas a 400 metros de la megaurbanización de El Pocero por fin serán trituradas para diversos usos. Es un residuo que podría considerarse muy grave por su volumen y tipología. La Comunidad de Madrid, la de Castilla La Mancha y el Ayuntamiento de Seseña han anunciado que la mayor parte del material se reciclará para hacer desde chanclas a aislamientos térmicos o pavimentos y otra parte, se quemará en cementeras.
Un peligro de incendio
Las soluciones que proponen desde las diferentes administraciones públicas no convencen a los ecologistas, que demandan soluciones más sostenibles.
Pero en lo que todos coinciden es que hay que vigilar la zona para evitar las consecuencias de un fuego de importantes dimensiones. “El humo podría provocar el cierre del aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas”, advierten en la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio del Ejecutivo madrileño. Un incendio sería muy difícil y muy largo de combatir y de extinguir dado que la combustión de los neumáticos es muy lenta. Además, el humo sería tan tóxico que obligaría a desalojar las 11.000 viviendas del barrio El Quiñón de Seseña y si el viento soplara hacia Valdemoro, pasaría lo mismo.
Además, según Ecologistas en Acción, cuando llueve, proliferan los mosquitos en los charcos y el estancamiento del agua es un foco de propagación de enfermedades.
Valorización de residuos
Ya os contábamos hace unos meses que según un estudio elaborado por el Instituto Cerdà sobre reciclado y valorización de residuos en la industria cementera en España, se evitó la emisión de 850.000 toneladas de CO2 en 2012, lo que supone un ahorro de casi 390.000 toneladas equivalentes de petróleo, comparable al consumo anual de 550.000 hogares.
Y una de las materias primas para esos residuos son los neumáticos fuera de uso. De hecho, el sector cementero asegura que “los combustibles alternativos con mayor aportación térmica durante el 2012 fueron el CDR (Combustible recuperado a partir de la fracción no reciclable de los residuos municipales e industriales), “otra biomasa” (celulosa o residuos vegetales procesados por la industria alimentaria), neumáticos fuera de uso y harinas animales.”
Añade además que es un ejemplo ilustrativo de cómo una adecuada gestión de los residuos puede redundar en notables disminuciones de gases de efecto invernadero, mediante la sustitución de una parte de los combustibles fósiles empleados, por combustibles obtenidos a partir de residuos que no se pueden reutilizar ni reciclar.
Un delito contra el medio ambiente
En 2003, el cementerio de neumáticos fue declarado ilegal por no respetar las normas medioambientales. La empresa que lo gestionaba, Disfilt SA. constituida en 1990, contaba con cuatro trabajadores y su especialidad era la fabricación de neumáticos y cámaras de caucho, además de la reconstrucción y recauchutado de neumáticos. Antes de abandonar la parcela tras la finalización del contrato de arrendamiento de los terrenos, la compañía acumuló expedientes administrativos y sanciones que rondaron los 600.000 euros (300.000 de la Junta de Castilla-La Mancha, 150.000 del Ayuntamiento de Seseña y 90.000 de la Comunidad de Madrid).
Ahora con una nueva gestión por parte de otra empresa y con todos los permisos y autorizaciones en marcha, el ritmo esperado de salida de los neumáticos de la zona a partir de octubre es de 1.000 toneladas mensuales.
Carlos Sánchez Criado
Publicista por la Universidad Complutense. Director comercial de publicaciones técnicas del sector de la energía durante doce años. Director de Energy News Events, S.L. desde 2012 difundiendo información en Energynews.es, movilidadelectrica.com e hidrogeno-verde.es. Y por supuesto, organizando eventos como VEM, la Feria del Vehículo Eléctrico de Madrid.