Un grupo de investigadores, financiados con fondos europeos NAVIGATE y ENGAGE, ha creado un estudio con un conjunto de datos mundiales sobre puestos de trabajo. El análisis perseguía conocer cómo respondería el empleo, en el sector de la energía, al intento de mantener la temperatura global por debajo de 2°C. La respuesta es que los puestos de trabajo pasarían de los 18 millones a 26 millones de aquí a 2050.
, anteriormente, a la posibilidad de creación de 8 millones de puestos de trabajo si se cumplieran los objetivos del Acuerdo de París. Entonces decíamos que un alto porcentaje procedería de la fabricación e instalación de fuentes de energía renovable. Es más, que las pérdidas de empleo como consecuencia de la disminución de trabajos relacionados con combustibles fósiles se compensaría.
Un informe de la Comisión Europea redunda en este aspecto. En esa línea, señalan, para cumplir con el objetivo de menos de 2°C, se debe dar un gran salto en la producción de energía hipocarbónica. Y, por supuesto, eliminar de forma gradual los combustibles fósiles.
Estos cambios deberían tener una repercusión importante en el empleo del sector de la energía. Consecuencia directa de la disminución del trabajo en el ámbito de los combustibles fósiles y del aumento en paralelo de empleo en nuevas industrias energéticas.
Estudio sobre la creación de puestos de trabajo
Sin embargo, y para saber su alcance en mayor profundidad, es por lo que unos investigadores han realizado un estudio global. Han contado con el respaldado de la financiación procedente de los fondos europeos NAVIGATE y ENGAGE (1). En consecuencia, crearon un conjunto de datos mundiales sobre descripciones profesionales de empleos en cincuenta países.
Anteriormente, los estudios solían basarse en los datos de empleo nacional de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico. Así, se evaluaban los empleos del sector de la energía del resto del mundo.
No obstante, el estudio actual combina datos sobre el empleo mundial de once tecnologías energéticas y cinco categorías profesionales de países como Brasil, la India, México y Nigeria. Y, además, de importantes economías productoras de combustibles fósiles como los Estados Unidos, Rusia, China y Arabia Saudí.
Repercusión
La fabricación y la instalación de fuentes de energía renovable podrían representar un tercio del total de los nuevos puestos de trabajo. Según el doctor Johannes Emmerling, investigador principal del Instituto Europeo de Economía y Medio Ambiente de RFF-CMCC y autor de contacto del estudio: la fabricación y la instalación de fuentes de energía renovable podrían representar un tercio de los 8 millones de empleos. Además, añade Emmerling, por esos puestos de trabajo “también podrían competir los países en términos de localización».
El análisis muestra que, en el supuesto muy por debajo de 2 °C: el 84 % de los empleos del sector de la energía para 2050 estarían relacionados con la energía renovable; el 11 % con los combustibles fósiles; y el 5 % con la energía nuclear.
La pérdida de puestos de trabajo en la extracción de combustibles fósiles se vería compensada por un aumento en el sector solar y eólico. Y, especialmente, en la fabricación.
Al respecto, Sandeep Pai, autor principal del estudio, de la Universidad de Columbia Británica (Canadá), añade:
“Los puestos de trabajo en el sector de la extracción son más susceptibles a la descarbonización, así que se deben preparar políticas de transición justas».
Por ejemplo, la movilidad de los empleos del sector de la fabricación será útil en zonas en que abunde la descarbonización. En muchos casos, los trabajadores del sector de los combustibles fósiles también tienen una influencia política debido a su historia y, entre otros, a las altas tasas de sindicalización.
Así pues, a medida que avanzamos hacia fuentes hipocarbónicas, resulta importante preparar un plan para favorecer la aceptación general de las políticas climáticas”.
Los resultados del estudio apoyado por los proyectos NAVIGATE y ENGAGE proporcionarán una mayor comprensión de: las ventajas y desventajas, los desafíos y las oportunidades de la transición hipocarbónica. El estudio se ha publicado en la revista «One Earth».
1: NAVIGATE (Next generation of AdVanced InteGrated Assessment modelling to support climaTE policy making) y ENGAGE (Exploring National and Global Actions to reduce Greenhouse gas Emissions).
Esther de Aragón es licenciada en Geografía e Historia. Lleva varias décadas trabajando para medios de comunicación de diferentes sectores. Además, es escritora y ha publicado libros de temática tan diversa como: guías de viaje, un libro sobre el vehículo eléctrico o una novela