El Puerto de Barcelona ha anunciado que apoya plenamente la aplicación de la nueva normativa de reducción de emisiones. Impulsada por la Organización Marítima Internacional, IMO 2020 ha entrado en vigor a primeros de enero. La normativa limita el contenido de óxido de azufre del carburante de los barcos, reduciendo notablemente las emisiones.
El nuevo reglamento afectará al transporte marítimo de todo el mundo, ayudando a dar sostenibilidad al sector.
Decíamos hace unos días que el transporte marítimo seguía siendo una asignatura pendiente por la cuestión de las emisiones. Entonces nos hacíamos eco de un estudio de Transport & Environment sobre los buques que llegan y salen de Europa.
Según indicaba dicho estudio, los barcos que llegan y salen de España emiten más CO2 que todos los coches de las 30 mayores ciudades españolas. Por su parte, las organizaciones ecologistas recuerdan que esta industria no paga ningún tipo de compensación por emisiones a la Unión Europea.
No todo es tan fácil
Sin embargo, desde la Organización Marítima Internacional añaden que los buques emiten contaminantes, efectivamente. Pero que también transportan grandes cantidades de bienes esenciales a través de los océanos del mundo.
Apuntan que en 2016, por vez primera, los buques transportaron más de 10 000 millones de toneladas de mercancías, según la UNCTAD.
Y añaden que los buques han sido siempre la forma más sostenible de transportar bienes y mercancías. Y están siendo cada vez más eficientes desde el punto de vista energético.
“Las reglas de la IMO sobre eficiencia energética respaldan la demanda de un transporte marítimo más limpio y ecológico. Un buque que es más eficiente energéticamente utiliza menos combustible y por lo tanto produce menos emisiones contaminantes“.
Con respecto a lo que dicen la organizaciones añaden:
“Algunas veces se ha dicho que unos pocos buques (que usen el fueloil con el contenido máximo de azufre permitido) producen tantas emisiones atmosféricas perjudiciales como todos los automóviles del mundo (si los automóviles estuviesen usando el combustible más limpio disponible).
Este argumento no solo se sitúa en el peor escenario posible, sino que no tiene en consideración la cantidad de mercancías que son transportadas por esos buques y la eficiencia relativa. Es importante tener en cuenta la cantidad de carga transportada y las emisiones por cada tonelada transportada, por kilómetro recorrido”.
De ahí que aseguren que los estudios demuestran que el transporte marítimo es, con mucha diferencia, el medio de transporte más eficiente energéticamente. Lo es en comparación con otros medios como la aviación, el transporte por carretera e incluso por tren.
La nueva normativa de azufre
Según la Organización, con el nuevo límite máximo, los buques deberán utilizar fueloil con un contenido de azufre que no exceda de 0,50% masa/masa. El límite actual es de 3,50% y ha estado en vigor desde el 1 de enero de 2012.
Los buques podrán cumplir la prescripción usando fueloil reglamentario de bajo contenido de azufre o utilizando otro combustible, como gas o metanol, según IMO.
Asimismo, indican, los buques pueden cumplir las prescripciones sobre las emisiones de SOx usando alguno de los métodos equivalentes aprobados. Entre ellos, los sistemas de limpieza de los gases de escape; o los “lavadores” que “limpian” las emisiones antes de ser liberadas en la atmósfera.
Mejora para el Puerto de Barcelona
La aplicación de IMO 2020 ha sido positiva para el Puerto de Barcelona. Según Europa Press, el Puerto ha afirmado que la norma:
“Comportará una mejora de la calidad del aire que afectará positivamente a los humanos que se encuentran cerca de puertos y zonas de navegación marítima”.
Además, reducirá la lluvia ácida y la acidificación de los océanos.
Asimismo, han explicado que la iniciativa va en línea con las diferentes acciones que se están impulsando para:
“Minimizar el impacto de la actividad portuaria en el entorno y contribuir a que ésta se desarrolle siguiendo criterios de sostenibilidad económica, social y ambiental”.
Entre las iniciativas:
- Promoción de la generación de energía renovable en la zona portuaria.
- Promoción de nuevos combustibles de cero emisiones de carbono para barcos, vehículos pesados y maquinaria de la terminal.
- Electrificación de los muelles para permitir la conexión eléctrica.
Esther de Aragón es licenciada en Geografía e Historia. Lleva varias décadas trabajando para medios de comunicación de diferentes sectores. Además, es escritora y ha publicado libros de temática tan diversa como: guías de viaje, un libro sobre el vehículo eléctrico o una novela