Pablo Corredoira hace en este artículo un exhaustivo análisis de las propuestas que hacen sobre el sector eléctrico Partido Popular, PSOE, Ciudadanos y Unidos Podemos de cara a las elecciones que tendrán lugar el próximo domingo 26 de junio 26J. El autor hace un repaso por los temas principales que afectan al sector. Desde el autoconsumo y su marco regulatorio actualmente en vigor pasando por la política de energías renovables o el sistema eléctrico en su conjunto hasta las medidas formuladas en torno al fracking, el déficit de tarifa o las centrales nucleares. Sin olvidar las políticas a adoptar en relación al cambio climático.
El pasado 20 de diciembre las urnas arrojaron un resultado electoral marcado por la aparición de unas formaciones políticas que han tenido la representación suficiente como para poner fin al famoso “bipartidismo”.
El panorama político resultante ha sido lo suficientemente fragmentado como para impedir la formación de un gobierno para los próximos cuatro años. Y, de esos polvos, son estos barros: apenas seis meses después, hemos vuelto a ser convocados a las urnas para designar a nuestros representantes. Unas elecciones que a muchos nos hastía y molesta puesto que la ciudadanía ya cumplió hace meses con su obligación. Han sido los distintos partidos los que no han hecho los deberes, los que al no sentar las bases para el establecimiento de pactos han demostrado anteponer sus intereses partidistas a los del conjunto de la sociedad abocándonos a todos nuevas elecciones.
Así pues, volvemos a entrar en la rueda de las sonrisas mecánicas, de la exaltación de méritos propios y la defenestración de los actos ajenos, de los besos a niños perplejos y asustados, de las banderitas de colores ondeando durante los mítines y de los programas y las denostadas promesas electorales, a los que vamos a dedicar este artículo. Porque, ya que no nos queda más remedio que volver a votar el próximo 26 de junio, por la cuenta que nos trae, puede resultar conveniente que conozcamos cual es la visión que tiene cada uno de los partidos al respecto del sector energético.
Ese, y no otro, es el objetivo último de este texto; detallar en unas breves pinceladas, de forma totalmente objetiva y sin sesgo político alguno, las propuestas expuestas en los distintos programas electorales para que, al menos en lo que a la parte energética se refiere, cada cual pueda tomar sus propias decisiones y evaluar la idoneidad de su voto.
Para facilitar dicho análisis hemos dividido todas las propuestas en cuatro grandes bloques:
En primer lugar, está la opinión de los partidos al respecto del autoconsumo y del marco
regulatorio actualmente en vigor. El segundo bloque lo conforma la política de energías
renovables. Dentro de este apartado, se exponen las distintas propuestas al respecto del
fomento de las energías renovables. El tercer bloque trata sobre el sistema eléctrico en su
conjunto y resume las medidas formuladas en temas tan diversos como el fracking, el déficit de
tarifa o las centrales nucleares. Por último, en el cuarto bloque se destacan las políticas a
adoptar en relación al cambio climático.
Autoconsumo
En línea con el compromiso adquirido el pasado 25 de febrero a través de la firma del “Acuerdo de compromiso para el desarrollo del autoconsumo eléctrico”, dentro de los programas electorales de PSOE, Unidos Podemos (UP) y Ciudadanos (C’s) se incluye la reforma o derogación de D900/2015. En este sentido, los tres partidos apuestan por la eliminación de los cargos al autoconsumo y las trabas administrativas actuales.
Por su parte, el Partido Popular (PP), no menciona en todo su programa la palabra autoconsumo, por lo que se entiende que se posiciona a favor de la norma que el mismo redactó.
Política de energías renovables
El PP centra su apuesta en la coordinación entre las distintas administraciones para cumplir con los objetivos de energías renovables. No obstante apuesta por un mix energético en el que tengan cabida todas las fuentes de generación eléctrica.
Entre las medidas de C’s se incluye la elaboración de un plan de incorporación de energías renovables en las desalinizadoras que permita el abaratamiento del agua y la aprobación de un Plan Estratégico de Transición Energética (PETE) que impulse las energías renovables y el autoconsumo.
UP también apuesta por un PETE centrado en las energías renovables y en todos los eslabones de la cadena de valor (investigación, desarrollo, fabricación e instalación). Se apuesta también por la sustitución de las energías fósiles por energías renovables.
El PSOE apuesta por la aprobación de una Ley de Transición Energética. Esta ley tendrá como uno de sus ejes principales la generación distribuida a pequeña escala con un papel predominante de las energías renovables. Asimismo, el PSOE incluye en su programa la necesidad de proporcionar una solución satisfactoria a los inversores en energías renovables.
Mercado eléctrico
En relación al déficit de tarifa, y como no podía ser de otra forma, todos los grupos políticos están de acuerdo en su eliminación. C’s apuesta por la auditoria de los costes de transición a la competencia (CTCs). UP va más allá y, aparte de prometer una auditoria de costes del sistema,
propuesta que comparte con el PSOE, aboga por la reclamación judicial de estos CTCs.
Estos tres partidos coinciden, asimismo, en la prohibición del uso de la técnica de fractura hidráulica (fracking). UP apuesta por el cierre de las centrales nucleares en 2024, mientras que el PSOE aboga por la sustitución sostenida de centrales nucleares por potencia renovable. Frente a estos esquemas, el PP apuesta por la energía nuclear dentro de un mix variado de generación.
PP, PSOE y C’s incluyen en su programa la necesidad de implementar medidas que redunden en
el impulso de las interconexiones eléctricas. Por otro lado, PSOE, C’s y UP instrumentarán medidas en pos de la lucha contra la pobreza energética.
Cambio climático
Todos los partidos apuestan, al menos, por el cumplimiento de los objetivos adquiridos en la
Cumbre de París (COP21). Conviene recordar que en dicha cumbre se llegó a un acuerdo global
entre 195 países plasmado en una serie de medidas para que a finales de siglo la temperatura
global media no se incremente en 2Cº. Entre estas medidas se encuentra el hecho de que cada
país pueda definir de forma individual su reducción de emisiones de gases de efecto
invernadero.
Para el cumplimiento de estos objetivos, tanto C’s, como PSOE y UP abogan por la aprobación
de una Ley contra el cambio climático, aunque en cada caso con un alcance diferente. UP
apuesta por un planteamiento energético que redunde en un sector energético 100%
renovable en 2050. PSOE propone, a través de una reforma fiscal ecológica, que las emisiones
de CO2 se reduzcan un 76% en 2050. C’s, por su parte, y sin dar cifras, incluye el cumplimiento
de los objetivos marcados por la COP21 y la Agenda Europea 2020.
En lo que al PP respecta su apuesta se centra en la coordinación intraterritorial para el cumplimiento de estos objetivos y la reducción del petróleo como fuente de energía primaria en el transporte. En la misma línea se expresa el PSOE que apuesta por la electrificación del transporte.
En todos los programas electorales analizados se pone de manifiesto la justa importancia que la clase política otorga al sector eléctrico. Y todos coinciden en algo: en acabar con el déficit de tarifa y favorecer el desarrollo de las energías renovables (aunque no todos en la misma medida). Ahora, solo falta ver si el partido que llegue al poder cambia las promesas electorales por realidades postelectorales y tenemos una política energética definida, sostenida y sostenible en el tiempo.
Pablo Corredoira
Socio de Haz Energia, SL
Carlos Sánchez Criado
Publicista por la Universidad Complutense. Director comercial de publicaciones técnicas del sector de la energía durante doce años. Director de Energy News Events, S.L. desde 2012 difundiendo información en Energynews.es, movilidadelectrica.com e hidrogeno-verde.es. Y por supuesto, organizando eventos como VEM, la Feria del Vehículo Eléctrico de Madrid.