El coronavirus está haciendo que la producción en España se transforme por un tiempo. Empresas y particulares adaptan y orientan su fabricación hacia el material necesario para luchar contra el COVID-19. Además, surgen numerosas iniciativas de apoyo y ayuda destacables.
En un momento como el que vivimos, cualquier respuesta, cualquier noticia positiva es un soplo de aire fresco. Desde cada sector, desde diferentes actividades, vemos cómo la sociedad hace frente común a un problema que nos golpea y afecta. El COVID-19 ha alterado el devenir del planeta y ha generado una incertidumbre para el futuro, a todos los niveles, que requiere de tiempo para su desaparición.
Pero mientras, nos llama la atención la capacidad de transformación de pequeñas, medianas y grandes compañías para enfrentar el problema. A nivel internacional, supimos hace poco tiempo que el fabricante chino de vehículos BYD, se había convertido en el mayor fabricante de mascarillas del mundo en apenas dos semanas.
Pero la producción en España de material necesario para luchar contra el COVID-19 también ha alterado a empresas de muy diferentes sectores. Y lo han orientado a la fabricación del material que requieren hospitales, sanitarios y profesionales de diferentes sectores. Su escasez se siente especialmente en relación con mascarillas, geles desinfectantes, trajes protectores y guantes. Algunos de estos productos son vitales para colectivos como sanitarios, emergencias, policía, transportistas, etcétera.
El esfuerzo de todos contra el COVID-19
Ahora mismo, es imposible abarcar a quienes de forma particular colaboran con su esfuerzo. Hay personas cosiendo mascarillas y quienes ceden tela para ello; empresas de calzado o textil que han reconvertido su producción; empresas y particulares que están fabricando en sus impresoras 3D respiradores artificiales; compañías de bebidas espirituosas o vinícolas que han cambiado la fabricación habitual por la de geles desinfectantes, como también ocurre con empresas de cosmética.
Al respecto de estas últimas, la Asociación Nacional de Perfumería y Cosmética (Stanpa) ha comunicado que las principales compañías están ofreciendo sus capacidades de fabricación a las autoridades. En este proceso están participando tanto las grandes multinacionales del sector como empresas nacionales y muchas otras pequeñas y medianas empresas.
Por citar algunos, pocos, ejemplos de empresas que reorientan su producción: Nivea España, González Byass, Bacardi, Pernod Ricard, Inditex o Callaghan.
Empresas chinas y mascarillas
Diferentes compañías chinas se están volcando con respecto a las mascarillas. La semana pasada, Xiaomi donó miles de mascarillas a nuestro país, algo que también anunció para otros países europeos.
Lo mismo ocurrió con Huawei, que anunció la donación de un millón de mascarillas a las autoridades españolas. En este caso, son mascarillas que, según indicó Europa Press en su momento, procedían de personal y familiares de trabajadores de Huawei en China. Puesto que allí las cosas han mejorado, consideraron bueno donarlas a España, que está viviendo momentos difíciles por el contagio.
Una compañía más se ha unido. Se trata de Oppo, el fabricante chino de smartphones, que ha anunciado la donación de 50.000 mascarillas al Ministerio de Sanidad.
Coronavirus Makers
No menos importante es lo que ocurre con los respiradores artificiales. Hace ya días que surgió el proyecto Coronavirus Makers, que está movilizando a los que realizan impresión en 3D para crear aparatos de respiración asistida. A través de un grupo de Telegram, se han unido y creado un modelo tridimensional de respirador. La idea involucra a empresas y particulares para fabricarlos en masa, mediante impresión en 3D y con un coste de producción de 1 euro aproximadamente.
Desde este punto de partida, la creación de respiradores artificiales con tecnología 3D ha provocado otras muchas iniciativas. Ya hay 2.000 personas involucradas en su producción y más de 50 iniciativas. Más allá de personas a título individual, cuya colaboración es inestimable, cuentan con el apoyo de numerosas empresas con impresoras 3D. Entre otras compañías y organizaciones, por citar algún ejemplo: la ONCE; HP; SEAT; Mango; Tecnalia; Fundación Cotec; CovidWarriors; ITAINNOVA; MujeresTech; Startupexplore; Makespace Madrid; Arduino; FabLab León…
O el caso de Navantia, que ha puesto sus recursos y experiencia con la impresión 3D a disposición de las administraciones públicas. Y además, ha formado un grupo de apoyo con investigadores de la Universidad de Cádiz (Grupo INNANOMAT) y otros colaboradores para conseguir que su labor sea efectiva y llegue a donde se necesita.
Otras iniciativas
También podemos hacer referencia a otras iniciativas de las que hemos tenido conocimiento. Es el caso de la compañía energética Galp. Se ha unido a la Federación Nacional de Asociaciones de Transportistas de España, Fenadismer, para distribuir gratuitamente mascarillas de protección. Y lo va a hacer a través de las casi 600 estaciones de servicio que tiene en toda España.
La propia compañía ha informado que los profesionales del transporte que las precisen pondrán obtenerlas de forma gratuita del personal de sus estaciones de servicio.
Galp ya había tomado diversas iniciativas en su red de estaciones de servicio. Entre ellas, favorecer el acceso a productos de alimentación, aseos, duchas, aparcamientos, etc… a los transportistas españoles para garantizar el suministro de bienes esenciales.
FUENTE: EUROPA PRESS
Esther de Aragón es licenciada en Geografía e Historia. Lleva varias décadas trabajando para medios de comunicación de diferentes sectores. Además, es escritora y ha publicado libros de temática tan diversa como: guías de viaje, un libro sobre el vehículo eléctrico o una novela