Desde el 1 de diciembre, el nuevo etiquetado energético de lavadoras, lavasecadoras, lavavajillas, frigoríficos, pantallas, monitores y luces LED debe haber sustituido por completo al anterior modelo de etiqueta energética. La organización de consumidores OCU ha visitado decenas de establecimientos y ha comprobado que hasta el 45% de las tiendas tiene todavía algún producto con el antiguo etiquetado de eficiencia.
La etiqueta energética es una herramienta que ayuda a los consumidores a comprender y comparar mejor la eficiencia de los electrodomésticos y otros aparatos. «Esto les permite tomar decisiones de compra más sostenibles y económicas, al tiempo que espolea a los fabricantes para sacar al mercado aparatos más eficientes», explican desde la organización de consumidores.
Los productos que han cambiado a una etiqueta energética nueva son los frigoríficos (incluidas las vinotecas), lavavajillas, lavadoras y lavasecadoras, pantallas, televisores y monitores y las fuentes de iluminación.
Así es el nuevo etiquetado energético
Con la última revisión del etiquetado energético se ha reajustado la escala de las clases de eficiencia recuperando la escala de la A a la G. Se eliminan las clases A+, A++ y A+++ que resultaban confusas.
Además, los requisitos para pertenecer a cada clase son ahora más estrictos, por lo que no hay de momento en el mercado productos que pertenezcan a las clases superiores A o B.
El nuevo etiquetado entró en vigor para los aparatos de línea blanca el 1 de marzo de 2021, mientras que la nueva etiqueta para las luces LED lo hizo el 1 de septiembre de 2021.
El calendario de aplicación está recogido en el Reglamento UE/2017/1369, proveniente de la Unión Europea. Los fabricantes, sus distribuidores, los establecimientos de venta y el comercio on line han tenido que cumplir los siguientes plazos de obligado cumplimiento:
- Desde el 1 de noviembre de 2020 los fabricantes no podían importar ni “poner en el mercado” productos con etiquetado antiguo.
- A partir del 1 de marzo de 2021 los productos a la venta con etiqueta antigua debían disponer de los datos del producto, la etiqueta reescalada y la hoja de información del producto. A partir de esta fecha ya se empiezan a vender productos con el nuevo etiquetado.
- Desde el 1 de marzo de 2021 y hasta el 30 de noviembre 2021 se produce una eliminación progresiva, tanto en tiendas físicas como on line, de los productos marcados con la etiqueta antigua.
- A partir del 1 de diciembre de 2021 ya no está permitido vender productos con la vieja etiqueta, por lo que se debe proceder a retirarlos.
El 45% de las tiendas
Para comprobar el cumplimiento de este calendario la OCU ha recorrido varios comercios físicos y virtuales. Han visitado un total de 113 tiendas en 9 ciudades y 15 páginas web durante la primera semana de diciembre de 2021; incluidos comercios de proximidad y grandes superficies como El Corte Inglés, Media Markt, Alcampo, etc.
«En todos ellos hemos observado si estaba presente (o ausente) el nuevo etiquetado energético en las familias de productos que debían cambiarlo: lavadoras, lavavajillas, frigoríficos y televisores», explican.
Las principales conclusiones muestran que:
- en el caso de las lavadoras, lavavajillas y frigoríficos, hay diferencias teniendo en cuenta el canal de venta. Las grandes superficies, como El Corte Inglés, Alcampo, Media Markt, etc, cumplen la normativa de la nueva etiqueta energética en prácticamente todos los productos que tienen expuestos
- en las tiendas especializadas y de barrio y en el canal on line no se está cumpliendo tan a rajatabla este reglamento, ya que hasta un 45 % de los establecimientos mostraba al menos un producto a la venta con la antigua etiqueta energética
- los televisores son un caso aparte; en ellos, el etiquetado energético brilla por su ausencia. Los televisores expuestos en las tiendas físicas no suelen mostrar su etiqueta, ni la antigua ni la nueva, una anomalía bastante seria en un aparato que puede permanecer encendido durante varias horas al día y que se mantiene en stand-by casi continuamente.
«Esta situación puede ocasionar confusión en los consumidores y perjudica a los productos que ya exhiben la nueva etiqueta, pues pueden parecer menos eficientes que los modelos que todavía muestran la antigua, cuando no es así», añaden los autores del informe.
OCU recuerda a los establecimientos que es obligatorio mostrar, junto al producto expuesto, su correspondiente etiqueta energética actualizada de forma claramente visible. A los consumidores les recomienda informarse bien de las características de los aparatos antes de comprar.
Fotos: OCU
Periodista de cuándo se maquetaba con tipómetro (no, no hace tanto...). Toda una vida dedicada a escribir sobre energía y acerca de cómo la movilidad cambia (para bien) la vida de las personas.