Un informe del tercer trimestre del año de la consultora de energía EnAppSys, destaca que en España el carbón ha sido expulsado casi por completo por el gas.
La principal conclusión del informe del tercer trimestre de EnAppSys (lo puedes consultar completo en este enlace) es que la Unión Europea está dando pasos agigantados en el proceso hacia la descarbonización.
También que el gas se está convirtiendo en la alternativa más utilizada por los países que lideran los trabajos para romper la dependencia del carbón.
Y, por último, que aunque todos los estados europeos están haciendo sus deberes en lo que al empleo de energías alternativas para la generación de electricidad, son Alemania y España los que más y mejores resultados están obteniendo.
La energía nuclear fue la fuente de energía dominante en Europa en los tres meses hasta finales de septiembre de 2019, proporcionando el 28,7% de la generación total
En datos, el informe de EnAppSys dibuja la situación actual de este modo:
- que las centrales eléctricas de carbón y lignito produjeron 95,8 TWh en los tres meses hasta finales de septiembre
- las centrales eléctricas de gas contribuyeron con 134,6 TWh al suministro de energía europeo durante el mismo período. Esto supone cerca de 41 por ciento más que el carbón
Estas cifras marcan una variación bastante significativa en el mercado. En este sentido, el carbón produjo 31 por ciento más que el gas en el tercer trimestre de 2018. También generó 37 por ciento más durante el mismo período en 2017.
España, impulsora de la descarbonización
La consultora afirma que en España el uso del carbón ha sido prácticamente eliminado en beneficio del gas. Mientras que Alemania, tradicionalmente un gran consumidor de carbón y lignito, ha dado cada vez más la espalda a este tipo de combustible.
«La reducción de la generación de carbón se ha visto facilitada principalmente por la expansión de la capacidad de la planta de gas», explica el informe del tercer trimestre de EnAppSys. «Ello se debe a que la generación de energías renovables se estancó en el 35 por ciento de la generación total de energía en el tercer trimestre», afirma.
Las plantas a gas proporcionaron 20,5%, carbón / lignito 14,6%, hidro 14,3%, viento 11,1%, solar 6,0% y biomasa 3,4%. El resto del petróleo (0,7%), residuos (0,6%) y turba (0,2%)
En el extremo contrario se encuentra la República Checa, «menos hábil en el cambio a otras fuentes de generación».
Menos dióxido de carbono, pero más metano
Aunque el gas se alza como la alternativa con más posibilidades para dar de lado el uso del carbón, son varias las voces expertas que se alzan para alertar de que aunque sus emisiones de CO2 son inferiores es un material altamente contaminante en metano y que este es un gas de efecto invernadero muy potente.
Ante esta situación, Bruselas ha iniciado una ronda de consultas. El político estonio Kadri Simson, el nuevo comisionado de energía de la UE y gran defensor del gas como alternativa al carbón ha dicho que las inversiones adicionales en tuberías y terminales de GNL serán una de las claves para la transición de la energía limpia.
Periodista de cuándo se maquetaba con tipómetro (no, no hace tanto...). Toda una vida dedicada a escribir sobre energía y acerca de cómo la movilidad cambia (para bien) la vida de las personas.