Australia es uno de los mayores emisores de carbono del mundo, de ahí la importancia del anuncio de su gobierno de que ha seleccionado las cinco tecnologías más eficaces para reducir los gases de efecto invernadero.
Hidrógeno producido a partir de energías renovables, almacenamiento de electricidad, producción de acero y aluminio con bajo contenido de carbono, captura y almacenamiento de carbono del suelo son las cinco áreas seleccionadas por el gobierno australiano como las más eficaces para reducir los gases de efecto invernadero.
Australia es uno de los mayores emisores de carbono del mundo, de ahí la importancia de que ponga en marcha proyectos que le permitan acercarse a los objetivos fijados por la comunidad internacional en el Acuerdo de París.
Las cinco tecnologías para reducir los gases de efecto invernadero por las que apuesta Australia
Según datos publicados por la agencia de noticias Bloomberg, desde 2006 Australia ha encadenado descensos en el volumen de emisiones, pero no son suficientes para alcanzar los objetivos europeos de emisiones.
Es por eso que el Gobierno anuncia que dará prioridad a cinco tecnologías para reducir los gases de efecto invernadero en los que invertirá 18 mil millones de dólares en los próximos 10 años.
Con este presupuesto espera conseguir los siguientes objetivos:
- Obtener electricidad a partir de energías renovables para volcar a la red a menos de 110 dólares por megavatio y hora
- Transporte y almacenamiento de dióxido de carbono por debajo de 20 dólares por tonelada
- Producción de acero de bajas emisiones a menos de 900 euros por tonelada
- Reducir las emisiones de carbono a menos de tres dólares por hectárea y año
La posición de Australia ante el Acuerdo de París
El primer ministro Scott Morrison ha dicho que Australia cumplirá cómodamente su objetivo climático de París de reducir las emisiones entre un 26% y un 28% desde los niveles de 2005 para 2030, pero no ha creado una Ley que recoja estos objetivos.Tampoco ha seguido el ejemplo de otros gobiernos estatales al establecer una meta de cero emisiones netas para 2050.
Periodista de cuándo se maquetaba con tipómetro (no, no hace tanto...). Toda una vida dedicada a escribir sobre energía y acerca de cómo la movilidad cambia (para bien) la vida de las personas.