De nuevo, os traemos un artículo para hablar de la valorización de los residuos en la industria. En este caso, explicaremos cómo es posible optimizar las cadenas de procesado del pescado y los mariscos para conseguir distintos productos de alto valor y reducir el impacto en el medioambiente, así como los retos para materializar estos avances.
Las sociedades y los consumidores están cada vez más preocupados por la seguridad alimentaria y la sostenibilidad de los sistemas de producción de alimentos. El marisco ha sido altamente defendido como una fuente de alimentos saludables y por sus credenciales de sostenibilidad.
La producción pesquera mundial ha aumentado un 44% en los últimos 20 años
Según Statista, la producción pesquera mundial superó las 184,6 millones de toneladas en 2022
. Desde 2002 en que la producción fue de 127,8 millones de toneladas, ha aumentado un 44%. Esta creciente demanda mundial de pescado y mariscos y la presión sobre el suministro están creando problemas de sostenibilidad. Por lo tanto, es necesario analizar la cadena de suministro y el ciclo de vida de estos sistemas para determinar sus ventajas en materia de sostenibilidad y cómo mejorarlas.
La economía circular tiene como objetivo reducir el desperdicio de los subproductos de procesamiento, aumentar la tasa de reutilización y la presión sobre los recursos y sistemas naturales. En el caso de los mariscos, se pierden grandes cantidades de biomasa a través de capturas incidentales/descartes , desechos de la acuicultura y subproductos generados en el ciclo de procesado. Todos ellos pueden ser valorizados para la generación de piensos, productos de valor añadido o la producción de alimentos.
Diferentes valorizaciones
No todos los productos de desecho de la cadena alimenticia pueden ser manejados de la misma forma. La Comisión Europea establece el riesgo que tienen estas sustancias para la salud humana y esto debe tenerse en cuenta a la hora de decidir un tipo de valorización u otra para los productos de desecho. Por ejemplo, aquellas piezas de pescado con alguna enfermedad evidente solo pueden ser incineradas y servir como combustible, mientras que ciertas partes del producto que se desechan para el consumo humano entran en otras categorías al poder usarse como fertilizantes o piensos.
¿Qué alternativas existen para valorizar los subproductos del marisco generados durante su procesado? ¿Cuál es su viabilidad económica?
Aquí podéis ver una lista de los usos alternativos que existen para los subproductos del procesado del pescado, ordenados de mayor a menor valor:
1. Productos bioactivos/funcionales para farmacéutica, cosmética o biotecnología que se pueden extraer y refinar por varios métodos.
2. Algunos productos de interés para el consumo humano como proteínas hidrolizadas (nutrición deportiva) ácidos grasos insaturados (Omega 3).
3. La mayoría de los subproductos animales de la pesca y las plantas de procesamiento se han utilizado durante mucho tiempo en la producción de harina de pescado destinada a la alimentación animal
4. Las microalgas pueden utilizarse para la recogida y el reciclado eficientes de nutrientes en los efluentes de la acuicultura y pueden reducir las concentraciones químicas y bioquímicas de demanda de oxígeno y metales potencialmente tóxicos. Pudiendo ser después recolectadas para piensos o abonos.
5. Fertilizantes ricos en nitrógeno, potasio y fósforo, disminuyendo la presión de explotación sobre las minas de estos minerales
6. Existen tecnologías consolidadas capaces de aumentar la biodegradabilidad y la capacidad de obtener metano a partir de los fangos y los desechos de las plantas de acuicultura. Aunque la complejidad de los reactores y el proceso aún son una importante barrera en muchos casos.
La educación será clave en la valorización de los subproductos
Los desafíos de la pérdida de pescado debido al cambio climático o la sobreexplotación de las estrategias de reciclaje emergentes también deberán considerarse e incorporarse en las vías de valorización. La comunicación, la educación y el compromiso con las partes interesadas son un punto clave para la transición a una economía circular. Y es que aumentar la conciencia y la aceptación impulsará la demanda para la valorización de los subproductos del pescado.
Con un poco de optimismo, el impacto de tal sistema de producción circular potencialmente conducirá a una mayor eficiencia de producción, reducirá la demanda de recursos naturales y una mayor producción de mariscos. Todo lo cual aborda muchos de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas al contribuir a la seguridad alimentaria y la sostenibilidad.
Fuente
: Cooney, R. et al. (2023). A circular economy framework for seafood waste valorisation to meet challenges and opportunities for intensive production and sustainability. Journal of Cleaner Production.
Imagen cedida por Depositphotos.
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