Ballesteros de Calatrava, en Ciudad Real, puede presumir de ser la primera república energética de España. Este municipio de apenas 400 habitantes quiere ser autosuficiente gracias a un pionero proyecto de energía solar
Veinte hogares de Ballesteros de Calatrava forman parte de la comunidad rural energética creada en este pequeño pueblo de Ciudad Real.
No pagan nada por sus instalaciones de autoconsumo y calculan que podrán conseguir un ahorro de la factura del 80%, una vez hayan amortizado la inversión.
Ballesteros Genera
Denominado Ballesteros Genera, el proyecto de autoconsumo de la localidad castellana se basa «en la instalación de una micro red eléctrica inteligente que genera, distribuye y suministra la energía renovable que demandan los vecinos del municipio».
Así lo explica Pedro Antonio Fuentes Sánchez, CEO de MásInteligencia, la empresa que está desarrollando el proyecto en declaraciones al diario El Español.
«El modelo consiste en dar energía 24 horas al día y 365 días al año, utilizando esta micro red compuesta por sistemas de producción fotovoltaica y almacenamiento masivo inteligente”, añade Fuentes.
Ahorro del 80% en la factura
Los vecinos que se han sumado al proyecto tendrán su factura congelada durante los próximos 10 años, pese a que siga subiendo el precio del kilovatio.
Con esto, el coste de la luz será alrededor de un 30 % más económico de lo que antes lo compraban y, además, en él está incluida la amortización de los activos.
Además, el proyecto contempla que dentro de 10 años los vecinos se conviertan en propietarios de la comunidad energética, con lo que notará un ahorro de la factura de hasta el 80% (con respecto a lo que pagan ahora).
Durante la primera fase que está a punto de concluir, se han instalado paneles solares en 20 hogares. Está previsto que durante la segunda fase se duplique la cifra.
Periodista de cuándo se maquetaba con tipómetro (no, no hace tanto...). Toda una vida dedicada a escribir sobre energía y acerca de cómo la movilidad cambia (para bien) la vida de las personas.
