La organización ha presentado en París su informe «Políticas energéticas de los países de la AIE: Francia 2016. Revisión» en el que destaca que durante los últimos diez años la economía francesa ha reducido su intensidad de carbono y se han beneficiado de una mayor eficiencia energética. El ambicioso objetivo de Francia de reducir al 50% su generación nuclear para 2025 durante va a transformar su sector energético, resalta la AIE.
La AIE elogia el liderazgo de Francia en la mitigación del cambio climático y la financiación verde en todo el mundo y en su propio territorio, gracias a la adopción del ambicioso conjunto de medidas que contenía la Ley de la Transición Energética para el Crecimiento Verde que aprobó en 2015.
Sin embargo, el informe estima que el plan del gobierno para reducir la proporción de energía nuclear desde el 78% al 50% en 2025, al tiempo que reduce las emisiones de gases de efecto invernadero en un 40% en 2030, requerirá una inversión significativa en eficiencia energética y un nuevo mínimo generación baja en carbono.
Además, la Agencia Internacional de la Energía muestra en el informe que el despliegue de las energías renovables en Francia está aún por debajo de la media de la AIE. Mientras la energía solar y la biomasa se están desarrollando bien, esta organización propone que una acción mayor podría ayudar a mejorar la red de energía eólica.
«Francia tiene que poner en práctica nada menos que una transformación de su sistema energético y el mercado de la energía» dijo Paul Simons, el director ejecutivo adjunto de la AIE, durante el lanzamiento del informe en París.
La reducción de energía nuclear en Francia
El ambicioso objetivo de Francia de reducción de energía nuclear durante la próxima década va a transformar su sector energético. La consecución del objetivo requerirá una cuidadosa orientación política, mercados eficaces y medidas fuertes de apoyo a las energías renovables y la eficiencia energética, según la AIE.
El informe destaca que las perspectivas para el sector nuclear de Francia en los próximos diez años será decisivo para cumplir con sus objetivos climáticos y energéticos y, al mismo tiempo, para mantener la seguridad de la electricidad.
La flota de centrales nucleares de Francia es la segunda mayor del mundo y ha alcanzado un promedio de vida de 30 años. Por ahora, ninguna decisión ha sido tomada a favor de la operación en espera de una revisión de seguridad a largo plazo, explica la AIE.
En España, en esta legislatura y de aquí a 2024 se deberá empezar a revisar la renovación de licencias de explotación de las centrales. Un reciente informe de Greenpeace afirma que a pesar de que el parque nuclear español ya ha alcanzado el 84% de su vida útil la financiación disponible para su desmantelamiento ni siquiera alcanza el 30%. En 2014, el citado fondo contaba con un saldo de 4.254 euros.
Carlos Sánchez Criado
Publicista por la Universidad Complutense. Director comercial de publicaciones técnicas del sector de la energía durante doce años. Director de Energy News Events, S.L. desde 2012 difundiendo información en Energynews.es, movilidadelectrica.com e hidrogeno-verde.es. Y por supuesto, organizando eventos como VEM, la Feria del Vehículo Eléctrico de Madrid.