El municipio granadino de Huétor Tájar cuenta con uno de los más destacados sistemas de calefacción centralizada de biomasa de Europa. Por eso, un equipo de técnicos del Western Development Commission, organismo irlandés parecido a las Diputaciones españolas, y del Dublin Technology Institute han visitado el municipio para conocer de primera mano cómo funciona todo el sistema.
Los visitantes, acompañados de técnicos de la Agencia Provincial de la Energía de Granada, han llegado a Huétor Tájar dentro de un proyecto denominado RokWood, que los ha llevado también al Centro Tecnológico Avanzado para las Energías Renovables y Biomasa (CTAER) de Mengíbar (Jaén), al Centro Logístico de Biomasa de Hueso de Aceituna de Darro y a la Compañía de Pellet de Biomasa Iberia Biomass Pellet en Tiena (Moclín). También han visitado la plantación piloto de chopos para generación de biomasa de astilla en la Vega de Granada.
La teniente de alcalde del Ayuntamiento hueteño, María Dolores López Jiménez, fue la encargada de recibir a la delegación irlandesa, junto a dos técnicos municipales que explicaron a los visitantes cómo funciona el sistema centralizado de biomasa de Huétor Tájar. En la actualidad, este sistema ofrece agua caliente y calefacción a cinco edificios públicos cercanos, que antes se calentaban con calderas de biodiesel, un sistema mucho más caro y contaminante.
Ahorros de hasta 80.000 euros anuales
Como explicó López Jiménez a la delegación irlandesa, “el plazo de retorno de la inversión realizada en la instalación ha sido de menos de dos años, reemplazando un consumo de unos 117.704 litros de combustible diesel por unas 294 toneladas de hueso de aceituna. Esto ha supuesto pasar de gastar cerca de 115.000 euros por año en diesel a gastar unos 35.000 euros al año en hueso de aceituna”.
El sistema de biomasa de Huétor Tájar calienta las instalaciones de la piscina municipal cubierta y gimnasio municipal, el pabellón deportivo y campo de fútbol, el colegio público San Isidro, con tres edificios distintos, y existe una previsión para conectar a la red el Centro de Servicios Sociales Comunitarios en el futuro. Además, el Ayuntamiento está estudiando la posibilidad de conectar más edificios públicos a este sistema si fuera posible.
Huétor Tájar es una de las afortunadas localidades de Andalucía que calienta sus instalaciones municipales con energía procedente de un sistema centralizado de biomasa, mucho más económica y menos contaminante que el gasoil que se emplea habitualmente. No en vano, en el último año el municipio ha logrado ahorrar cerca de 80.000 euros en gastos de calefacción utilizando huesos de aceituna de desecho para calentar sus edificios públicos.
Características de la planta
Desde que se puso en marcha la primera caldera de biomasa de la localidad, ubicada en la piscina municipal, el Consistorio ha gastado 37.000 euros anuales en biomasa, frente a los 115.000 que costaba el gasoil (un 68% menos). Y eso teniendo en cuenta que si la campaña de la aceituna es mala puede encarecer el precio de la biomasa.
La construcción de la planta de Biomasa de Huétor Tájar ha tenido un coste de 312.630 euros, de los cuales 103.500 euros son de aportación municipal y el resto han sido financiados por el Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural, y por la Junta de Andalucía, a través de la Consejería de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente.
Carlos Sánchez Criado
Publicista por la Universidad Complutense. Director comercial de publicaciones técnicas del sector de la energía durante doce años. Director de Energy News Events, S.L. desde 2012 difundiendo información en Energynews.es, movilidadelectrica.com e hidrogeno-verde.es. Y por supuesto, organizando eventos como VEM, la Feria del Vehículo Eléctrico de Madrid.