Las temperaturas globales podrían aumentar más de 3ºC en los próximo 30 años, un hecho que repercutiría de forma notable en la economía mundial, que podría llegar a reducirse en un 18%. El cambio climático supone la mayor amenaza a largo plazo tanto para el ser humano como para su economía, por lo que cumplir los objetivos del Acuerdo de París es fundamental. El nuevo Índice de Economía del Clima del Swiss Re Institute hace una llamada a cumplir con estos objetivos y algo más: la implicación de los sectores público y privado en la transición energética.
El instituto ha elaborado un informe para examinar cómo 48 economías se verían afectadas por los efectos del cambio climático en cuatro escenarios diferentes de aumento de la temperatura. El calentamiento global agrava el impacto de las catástrofes naturales relacionadas con la meteorología y puede provocar importantes pérdidas de ingresos y productividad a lo largo del tiempo. Por ejemplo, el aumento del nivel del mar provoca la pérdida de tierras que podrían haberse utilizado de forma productiva y el estrés térmico puede provocar la pérdida de cosechas. Las economías emergentes de las regiones ecuatoriales serían las más afectadas por el aumento de las temperaturas
Así podría ser el futuro de las grandes economías
En un escenario severo de aumento de la temperatura de 3,2ºC, China podría perder casi una cuarta parte de su PIB (24%) a mediados de siglo. Estados Unidos, Canadá y el Reino Unido sufrirían una pérdida de alrededor del 10%. Europa sufriría un poco más (11%), aunque economías como Finlandia o Suiza están menos expuestas (6%) que, por ejemplo, Francia o Grecia (13%).
Thierry Léger, Director de Suscripción del Grupo y Presidente de Swiss Re Institute, ha asegurado: «El riesgo climático afecta a todas las sociedades, a todas las empresas y a todos los individuos. En 2050, la población mundial aumentará hasta casi 10.000 millones de personas, especialmente en las regiones más afectadas por el cambio climático. Por ello, debemos actuar ahora para mitigar los riesgos y alcanzar los objetivos de cero emisiones. Asimismo, como muestra nuestro reciente índice de biodiversidad, la naturaleza y los servicios de los ecosistemas proporcionan enormes beneficios económicos, pero están muy amenazados. Por eso, el cambio climático y la pérdida de biodiversidad son dos retos que debemos afrontar como comunidad mundial para mantener una economía sana y un futuro sostenible”.
¿Qué países son los más vulnerables?
Swiss Re Institute también ha clasificado a cada país en función de su vulnerabilidad a las condiciones meteorológicas extremas de sequedad y humedad. Del mismo modo, ha examinado la capacidad del país para hacer frente a los efectos del cambio climático. En conjunto, estos resultados generan una clasificación de la resiliencia de los países a los impactos del cambio climático.
La clasificación muestra una visión similar a la del análisis del impacto del PIB: los países más perjudicados suelen ser los que tienen menos recursos para adaptarse y mitigar los efectos del aumento de la temperatura global. Así, los más vulnerables en este panorama son Malasia, Tailandia, India, Filipinas e Indonesia. En cambio, economías avanzadas del hemisferio norte como Estados Unidos, Canadá, Suiza y Alemania, son menos vulnerables.
Las economías asiáticas serían las más afectadas, ya que China corre el riesgo de perder casi el 24% de su PIB en un escenario severo, mientras que la mayor economía del mundo, Estados Unidos, perdería cerca del 10%, y Europa casi el 11%.
La colaboración público-privada es crucial
Según apunta el instituto en su informe, las medidas coordinadas de los mayores emisores de carbono del mundo son cruciales para cumplir los objetivos climáticos. Los sectores público y privado pueden facilitar y acelerar la transición, sobre todo en lo que respecta a las inversiones en infraestructuras sostenibles que son vitales para mantenerse por debajo de un aumento de la temperatura de 2°C.
Dado el horizonte a largo plazo de sus obligaciones y el capital a largo plazo que pueden comprometer, los inversores institucionalesi, como los fondos de pensiones o las compañías de seguros, también están en una posición ideal para desempeñar un papel importante.
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Graduado en Periodismo por la Universidad Complutense. Redactor en energynews.es, movilidadelectrica.com e hidrogeno-verde.es.