ha reabierto el mercado de renta fija en Europa en plena crisis generada por la guerra en Ucrania, al cerrar con éxito la emisión de un nuevo bono verde por importe de 1.000 millones de euros y con vencimiento a diez años.
Tal y como adelanta en un comunicado, la compañía se convierte así en el primer emisor español en salir al mercado en la actual coyuntura. También en uno de los primeros europeos junto con la alemana BASF, la danesa Vestas y la estadounidense Berkshire Hathaway.
Esta operación le permite reforzar su «ya confortable posición de liquidez», anticipando buena parte de la financiación que ha de realizar durante 2022 reduciendo el riesgo de mercado por la evolución de los tipos de interés y márgenes de crédito.
Bonos verdes para parques eólicos
Con una demanda que ha superado los 3.000 millones de euros, el cupón ha quedado fijado en el 1,375%, lo cual ha sido posible al alcanzar un diferencial de 60 puntos básicos sobre la referencia midswap para el plazo correspondiente. La emisión se ha colocado entre 181 inversores, principalmente europeos y de Reino Unido.
«Los bonos verdes suelen generar una mayor demanda y un menor coste, dado que al interés de los inversores habituales se añade el de los inversores socialmente responsables», explican.
Una gran parte de la operación (69% según BBVA, Green Advisor de la operación) se ha colocado entre este colectivo de inversores, por lo que Iberdrola continúa diversificando su base inversora y ampliando la demanda, lo que mejora la ejecución de estas operaciones en momentos difíciles de mercado.
Los fondos obtenidos se destinarán a financiar parcialmente inversiones del grupo en instalaciones renovables de eólica marina en Francia (el parque offshoreSt. Brieuc) y Alemania (Baltic Eagle).
Con esta nueva emisión, la compañía presidida por Ignacio Galán continúa afianzando su liderazgo en financiación sostenible, con más de 39.000 millones de euros de volumen de operaciones vivas, de los cuales cerca de 16.000 millones de euros son emisiones de bonos verdes.
Una de las principales características de los bonos verdes es que los fondos obtenidos se destinan a la financiación de proyectos sostenibles, socialmente responsables y con un impacto positivo para el medioambiente.
Periodista de cuándo se maquetaba con tipómetro (no, no hace tanto...). Toda una vida dedicada a escribir sobre energía y acerca de cómo la movilidad cambia (para bien) la vida de las personas.