Incentivar a los consumidores a cambiar sus hábitos energéticos para hacerlos más eficientes, más flexible y, de este modo, ahorrar costes para el bolsillo y el medio ambiente. Este es el objetivo del Proyecto europeo Holistic Demand Response Services for European Residential Communities (HESTIA), financiado por la UE e impulsado por 19 empresas, instituciones y clústeres de Italia, Francia, Austria, España, Irlanda, Países Bajos, Dinamarca, Bélgica y Serbia.
El proyecto europeo HESTIA arrancó a finales de 2020. Durante tres años los miembros integrantes del proyecto desarrollarán diversas acciones y propuestas tecnológicas enfocadas a racionalizar el consumo de energía por parte de los consumidores finales.
De momento ya se han puesto en marcha tres pruebas piloto en zonas residenciales de Holanda, Francia e Italia para poder conocer y analizar los hábitos de consumo de los usuarios. También para entender las preferencias y necesidades a la hora de consumir energía, y las infraestructuras que utilizan.
Una vez extraídos estos datos se creará un sistema para que todos los agentes implicados en el uso de la energía (proveedores, instituciones, entidades, comunidades de vecinos, etc) flexibilicen y optimicen sus servicios en función, por ejemplo, de las franjas horarias de uso y siguiendo por tanto los criterios del «Demand-Response».
HESTIA, un proyecto europeo con 7,5 millones de euros de presupuesto
Una vez finalizadas las tres pruebas piloto, el proyecto HESTIA buscará ampliarse a otras zonas residenciales de Europa.
El objetivo a largo plazo es reducir emisiones y contribuir a cumplir los Objetivos de Desarrollo Sostenible fijados por las Naciones Unidas, la Agenda 2030 y los objetivos medioambientales, energéticos y climáticos de la UE para convertirse en climáticamente neutra en 2050.
El proyecto tiene un presupuesto total de 7 millones y medio de euros, de los que la Unión Europea aporta casi seis millones. El consorcio del proyecto Hestia está formado por 19 2 partners de 9 países diferentes.
Entre los partners hay empresas de energía, empresas tecnológicas (que van desde el almacenamiento de energía hasta la fabricación de domótica), instituciones públicas, consultoras o clústeres.
Periodista de cuándo se maquetaba con tipómetro (no, no hace tanto...). Toda una vida dedicada a escribir sobre energía y acerca de cómo la movilidad cambia (para bien) la vida de las personas.