ha dado a conocer las cifras de generación de energía termosolar en 2019, que ha vuelto a superar los 5 TWh de generación eléctrica. Concretamente, el año pasado ha generado 5.166 GWh en España. Eso representa un incremento del 16,8 % sobre 2018 y un 3,8% respecto a la media de los últimos 5 años.
El 2018 fue un año muy importante para la energía termosolar. Y eso a pesar de que meteorológicamente no fue bueno para la generación de energía solar en nuestro país. Además, el despliegue de proyectos comerciales en el mundo fue notable. Y aunque en España no se ha construido ninguna central en los últimos tiempos, es destacado el papel relevante que va tomando esta energía. Sobre todo porque es idónea para complementar a la generación fotovoltaica al final de la tarde y por la noche.
Así lo indicaba hace ya tiempo la Asociación Española para la Promoción de la Industria Termosolar (Protermosolar) a través de su estudio: Transición del Sector Eléctrico: Horizonte 2030.
Entonces, la asociación indicaba la importancia de un reparto equilibrado de la potencia solar entre energía fotovoltaica y termosolar. Para ellos era la clave del mix propuesto en el informe.
La asociación ha explicado que el 2019 también ha sido un buen año para esta energía. Ha demostrado su fiabilidad con contribuciones puntuales de cerca del 10 %. Y, además, con el 2,1 % del total de generación eléctrica en España en 2019. Todo eso hace que se vaya consolidando su imagen de tecnología fiable, tras más de 10 años de operación de parte de su flota.
Asimismo, en 2019, ha reforzado su papel como tecnología imprescindible ante la transición energética. El almacenamiento térmico del que estarán provistas las instalaciones futuras, refuerza ese papel. Como decíamos, esta energía permite empezar a despachar al atardecer, reemplazando parte de la producción fotovoltaica y reduciendo la necesidad de respaldo fósil posterior.
España y la generación de energía termosolar
Además, según Protermosolar, las actuales instalaciones siguen operando sin dar señales de degradación. A cambio, van incorporando nuevas experiencias para conseguir ser más eficientes, en cuanto a la generación de energía termosolar.
La potencia instalada en España es de 2.300 MW. Y la contribución de las empresas españolas en los mercados internacionales es de alrededor del 75 %.
También decíamos hace unos meses:
“El parque termosolar español está formado en una tercera parte por centrales con almacenamiento. Cargan y descargan sus tanques más de 250 días al año. Con ello mantienen su capacidad de operación sin degradación y permiten generar electricidad tras la puesta de sol”.
La asociación explica que España cuenta, a diferencia de otros países europeos, con la posibilidad de desplegar centrales termosolares. La casusa radica en la disponibilidad de emplazamientos y la capacidad de sus empresas. Todo ello hace que esta energía sea un punto importante para la consecución del objetivo de renovables y descarbonización previsto en el PNIEC a 2030.
Ventajas de la termosolar
Para la asociación es vital avanzar para conseguir los objetivos del PNIEC. En ese tema, considera, que debe tenerse en cuenta la tecnología termosolar. Por tanto, y para reforzar la posición de la generación de energía termosolar se debería:
- Implantar sistemas de almacenamiento en centrales que no disponen o hibridar algunas centrales con biomasa. Eso reforzaría su valor para el sistema.
- Incorporar el autoconsumo fotovoltaico en las centrales actuales incrementaría su producción síncrona y gestionable.
Las ventajas de todo ello, para Protermosolar:
- Respecto a la flota futura, su despacho complementario a la fotovoltaica contribuiría a la integración de energía renovable en el sistema. Eso optimizaría las infraestructuras de transmisión, existentes y futuras, y contribuiría a la estabilidad de la red.
- Las nuevas centrales, provistas de sistemas de almacenamiento y despachando desde el atardecer, aliviarían las rampas que provoca la producción fotovoltaica por la tarde. Además, evitarían, en gran medida, las emisiones que, de otra forma, irían asociadas a la combustión de gas en los ciclos combinados.
- Igualmente, los tanques de almacenamiento de las centrales termosolares podrían utilizarse para captar los vertidos de las tecnologías eólica y fotovoltaica. Ayudaría a no tener que realizar inversiones superiores a los 20.000 millones de euros en sistemas de baterías o nuevas instalaciones de bombeo.
- Las centrales termosolares podrían actuar incluso de reserva estratégica a disposición del operador del sistema para los momentos de máxima demanda. Es consecuencia de su facultad para mantener una parte importante de su capacidad durante días, semanas o meses, para cuando fuese requerido con disponibilidad absoluta.
Esther de Aragón es licenciada en Geografía e Historia. Lleva varias décadas trabajando para medios de comunicación de diferentes sectores. Además, es escritora y ha publicado libros de temática tan diversa como: guías de viaje, un libro sobre el vehículo eléctrico o una novela