En las últimas décadas, el uso de energías renovables como la solar y la eólica, ha crecido de forma exponencial. Sin embargo, su gran obstáculo sigue siendo la dificultad para almacenar este tipo de en energías de manera eficiente y prolongada. Hasta ahora, son muchos los proyectos que intentan solventar el problema de almacenamiento de energía. Y la solución, parece ser, el almacenamiento en una potente batería.
En respuesta a este problema, un grupo de investigadores de Estados Unidos ha desarrollado la batería más poderosa del mundo hasta la fecha, lo que podría transformar por completo la industria energética. Se trata, sin duda, de innovador avance para mejorar la eficiencia energética mundial, y también abre nuevas oportunidades para lograr un futuro más sostenible.
Form Energy, la empresa detrás de esta potente batería, está financiada por el Departamento de Energía para proyectos en todo el Atlántico Norte, del cual ha recibido más de 380 millones de dólares en subvenciones.
Funcionamiento de la batería de Form Energy
Esta innovadora batería, diseñada para almacenar hasta 8.500 megavatios-hora (MWh), promete transformar por completo el almacenamiento de energía renovable. Estados Unidos ha patentado este dispositivo que impresiona por su capacidad, además de por la avanzada tecnología que incorpora.
El sistema de almacenamiento estará compuesto por múltiples módulos de baterías independientes, comparables en tamaño a un par de electrodomésticos como una lavadora y una secadora, según explicaron los portavoces de Form Energy. Cada uno de estos módulos albergará alrededor de 50 celdas de un metro de altura, que contendrán electrodos de hierro y aire, sumergidos en una solución electrolítica acuosa y no inflamable.
Este diseño modular facilita su instalación, además de permitir una mayor flexibilidad para su desarrollo a gran escala, optimizando el almacenamiento de energía y mejorando la seguridad en comparación con tecnologías tradicionales. Dado que es capaz de almacenar grandes volúmenes de energía, esta batería garantiza un suministro estable incluso en momentos en que la producción de energía solar o eólica disminuye. Esto resulta especialmente importante en áreas que dependen en gran medida de estas fuentes renovables, como ciertas zonas de Estados Unidos, Europa y Asia.
La batería en el escenario energético actual
Las fuentes renovables afrontan, hoy en día, un importante reto: su naturaleza intermitente. Los paneles solares sólo producen energía cuando hay luz solar y las turbinas eólicas dependen del viento, lo que causa variaciones en la generación de electricidad. Por ello, el desarrollo de sistemas que puedan almacenar grandes volúmenes de energía para utilizarlos en momentos de baja producción se ha vuelto imprescindible.
El diseño de la batería más poderosa del mundo llega como una solución a esta problemática. Su capacidad de almacenamiento, que alcanza los 8.500 MWh, representa un revolucionario avance, facilitando una integración más eficiente de energías renovables en las redes eléctricas. Este desarrollo promete un suministro energético mucho más constante, fiable y amigable con el medio ambiente, disminuyendo significativamente la necesidad de depender de fuentes fósiles altamente contaminantes.