La fractura hidráulica es, sin lugar a dudas, la tecnología más polémica y controvertida de estos años. Las opiniones tan polarizadas a favor y en contra crean muchas dudas en la sociedad. Y ahora, un nuevo estudio de Energy Watch Group sobre las consecuencias y la evolución actual de fracking pone de nuevo sobre la mesa la idoneidad de la extracción del gas no convencional.
Un estudio nuevo de Energy Watch Group (EWG), que examina las consecuencias de la fractura hidráulica en los Estados Unidos, advierte fuertemente en contra de la expansión de la extracción de gas de esquisto en Alemania y Europa. Los costes y los daños ambientales producidos por la fractura hidráulica, dice, están fuera de toda proporción con la cantidad de materias primas extraídas.
¿Fin del boom el fracking?
Según el informe, el fracking implica una enorme destrucción del medio ambiente, un alto consumo de aguas subterráneas y la extracción de arena a gran escala. Lo que es más, el endeudamiento de las empresas en la industria fracking está en constante aumento. La caída en los precios del petróleo desde el otoño de 2014 -un fenómeno relacionado con la depreciación financiera de las reservas de petróleo y gas – ha causado problemas económicos para muchas empresas. La industria del gas de esquisto no está pasando su mejor momento. Los despidos masivos y las bancarrotas revelan la verdadera historia detrás del cuadro optimista de un brazo fiable de la economía fósil.
Una opinión que no comparte Shale Gas España, la plataforma española sobre la exploración y desarrollo del sale gas, ya que asegura a EnergyNews que “los últimos datos que tenemos respecto al endeudamiento vienen a contradecir esta afirmación, de 120 empresas que concentran el 95% de los pozos de fracking en EEUU, 97 de ellas tienen un ratio de deuda del 1,5 sobre su EBITDA y 79 por debajo del 0,7, lo que demuestra que sus niveles de endeudamiento son absolutamente razonables”, y añade que “la empresa que más pozos tiene en funcionamiento, con 77, tiene un ratio de deuda sobre EBITDA por debajo del 0,2”.
El estudio también explica que en 2005, el entonces presidente George W. Bush aflojó las regulaciones ambientales para el fracking de petróleo crudo y gas natural. Como resultado, la producción de gas de Estados Unidos ha aumentado considerablemente, creando un boom que ha atraído a muchos a creer en la falacia de este petróleo y gas.
Expansión en Europa
El estudio ofrece una visión general de las consecuencias de una posible expansión de la extracción de gas de esquisto en Alemania, basado en la experiencia americana. El aparente éxito fuera de sus fronteras no puede ser transferido a Europa, donde prevalecen otras condiciones.
Dice que no están disponibles depósitos de gas de esquisto prometedores, ni son comparables los requisitos de infraestructura. En la UE, el fracking tiene muy bajo potencial. Sin embargo, los políticos -en particular el vicepresidente de la Comisión Europea, Maroš Šefčovič – quieren proceder con la extracción de gas mediante fracking a toda costa.
«La experiencia de Estados Unidos muestra que el éxito a corto plazo fue a costa de grandes daños colaterales. El año pasado, Nueva York promulgó una prohibición de fracking. Y en Alemania, el fracking no será capaz de reproducir casi el papel que ha jugado en los EEUU. Es pura ilusión creer que uno podría repetir los éxitos del país norteamericano y al mismo tiempo minimizar los efectos ambientales asociados. Francia ya ha impuesto una prohibición de fracking, y varios otros países de la UE han instituido una moratoria. ¿Por qué Alemania va a asumir los riesgos cuando la política energética y climática debate requiere de otras medidas?», se pregunta el Dr. Werner Zittel, autor del estudio y director de la Fundación Ludwig Bölkow.
Para Shale Gas España, “la fortaleza financiera de las empresas del sector lo contradice nuevamente. En lo que llevamos de año 2015, se han producido 18 ampliaciones de capital. En EEUU hay empresas muy grandes que tienen diversificado su negocio, y por lo tanto, tienen mucho músculo financiero, pero también hay empresas pequeñas que efectivamente están teniendo más dificultad, pero el punto a partir del cual no es rentable la extracción depende de las zonas”.
Desde diciembre de 2014, la polémica propuesta de ley fracking es objeto de debate. Este mes, el Bundestag alemán comenzará las deliberaciones sobre su reglamento.
Esta situación especial, que requiere una decisión socialmente responsable compatible con la política climática, inspiró a Energy Watch Group para preparar un informe provisional. «Es totalmente incomprensible que una política gubernamental para fracking todavía domine desde Bruselas a Londres o a Berlín, a expensas de la protección del medio ambiente y contra la voluntad de la población afectada, mientras que al mismo tiempo se pone una presión continua sobre la expansión de las energías renovables», dice Hans-Josef Fell, presidente del Grupo de Vigilancia de la Energía.
Caso español
“La situación en España es muy diferente”, asegura a EnergyNews Shale Gas España, “estamos en los primeros proyectos de exploración para investigar si en las zonas donde se han hecho estudios geológicos hay efectivamente gas esquisto, aunque las evidencias científicas así lo aseguran. Pero la confirmación solo se puede dar mediante un proyecto de exploración. No hay que olvidar que en España los requisitos medioambientales son muy estrictos y ninguna empresa quiere tener ningún problema con ello”.
“En nuestro país se ha calculado que si accedemos a los recursos de gas que hay bajo nuestro suelo, podríamos tener unas reservas para el consumo durante 70 años, por lo que entendemos que no es para toda la vida, sino que es un recurso compatible con las energías renovables ya que éstas no garantizan la interrumpiblidad del sistema eléctrico”, concluye Shale Gas España.
Carlos Sánchez Criado
Publicista por la Universidad Complutense. Director comercial de publicaciones técnicas del sector de la energía durante doce años. Director de Energy News Events, S.L. desde 2012 difundiendo información en Energynews.es, movilidadelectrica.com e hidrogeno-verde.es. Y por supuesto, organizando eventos como VEM, la Feria del Vehículo Eléctrico de Madrid.
A ver si dejamos de decir mentiras de empleo y 70 años de gas que ya vale la bobada.
https://fracturahidraulica.wordpress.com/2014/06/19/el-trile-de-aciep-pero-hubo-alguna-vez-70-anos-de-gas/