Enel
ha anunciado un nuevo plan estratégico para los años 2023-2025 en el Capital Markets Day. Incluye inversiones por valor de 37.000 millones de euros en sus principales mercados y en renovables. El programa de inversiones del grupo se centrará en la eólica, que recibirá la mitad de los fondos.
Las inversiones que Enel realizará en renovables serán en los mercados de Italia, España, Estados Unidos, Brasil, Chile y Colombia. Incluyen una apuesta decidida por la generación eléctrica mediante energías renovables, especialmente la eólica terrestre.
Además, el grupo italiano va a acelerar su salida del mercado del gas, y no sólo en España, sino a nivel global. En esa línea, va a vender durante el próximo año su cartera de clientes de nuestro país.
Las novedades del plan
Además de las inversiones en renovables en los mercados clave citados, Enel se va a deshacer de activos en varios países. Con ello, quieren saldar parte de su deuda. Entre ellos, la venta del negocio de gas a Endesa.
El grupo italiano apuesta por descarbonizar su negocio, dejando de lado el gas para acelerar la electrificación verde. En esa línea, como decíamos, la eólica, que recibirá la mitad de los fondos. Desarrollarán la mayor parte en Europa por tener un «contexto regulatorio estable«. Sin embargo, Enel descarta la eólica marina, por no considerarlo estratégico.
La mayor parte del plan, 22.000 millones de euros, se dedicarán al negocio comercial. El 84% de estos, más de 17.000 millones, se destinarán a generación eléctrica para alcanzar los 75 GWh en operación en 2025. Mientras, el 16% restante tendrá como fin ampliar el negocio retail, mejorando los servicios que ofrecen a clientes. Entre esos servicios, los puntos de recarga para vehículos eléctricos, que multiplicarán por cuatro, hasta 1,6 millones.
Las renovables, claves para los resultados de Enel
Gracias a este impulso hacia las energías verdes, Enel prevé disparar su Ebitda un 13% en esta rama de negocio. Alcanzaría los 14.900 millones de euros, 4.500 millones más que ahora.
A eso se suman otros 15.000 millones de inversión en el negocio de redes y distribución, la mayoría de ellas en el viejo continente. Por ello, estima que el Ebitda correspondiente a redes crezca un 4%, hasta los 7.300 millones, 300 millones más que a cierre de 2022.
Las renovables, claves del nuevo plan estratégico, sustituirán de forma paulatina a casi 30TWh que hoy se producen con combustibles fósiles. Eso permitirá generar hasta 1.100 millones de euros adicionales.
En cuanto a las coberturas completas de los contratos fijos de ventas y PPAs a largo plazo generarán otros 600 millones. Impulsarán el resultado final de explotación en los próximos años, junto a la estrategia comercial y un aumento de los volúmenes y servicios vendidos.
Desinversiones y reducción de deuda
En cuanto a las ventas, Enel ha anunciado: la venta de su cartera de gas en España, una salida de Perú y Argentina y la venta total del negocio en Rumanía.
Además, estudia deshacerse de su central eléctrica en Ceará (Brasil) para centrarse en distribución de redes en las grandes ciudades del país. Entre ellas, Sao Paulo o Río de Janeiro.
Asimismo, este año cerró su salida de Rusia y la venta de otros activos en Chile y Brasil.
Siempre que las condiciones del mercado se mantengan, Enel estima que las nuevas inversiones y ventas reduzcan su deuda neta en 12.200 millones el próximo año 2023. Entonces se contabilizarán las desinversiones mencionadas. A esa cifra se suman los 5.600 millones que reducirá a cierre de 2022 y otros 2.800 millones menos en 2024. Con ello, pasará de tener contabilizados 60.000 millones hoy a cerca de 51.000 millones en 2025.
Enel descarta el hidrógeno
Puesto que resulta raro ver que un grupo energético se desvincula del hidrógeno, se ha preguntado al respecto durante la presentación. Concretamente, a las preguntas realizadas al consejero delegado, Francesco Starace, la respuesta ha sido que no van a realizar inversiones en hidrógeno verde. Al menos, en los próximos años. Consideran que no es una “tecnología madura”. Durante la rueda de prensa, Starace ha explicado:
«Debemos esperar un año o dos hasta incorporarlo al plan, aunque esto no quiere decir que no estemos trabajando en él. Estamos ensayando la tecnología; trabajamos en planes para que el hidrógeno verde sea competitivo sobre el gris; pero estas inversiones no se acelerarán en los próximos tres años”.
Esta postura contrasta con la de otras grandes energéticas. Entre ellas, Iberdrola, que anunció un plan para liderar la producción de H2 verde y multiplicar su producción por trece hasta 2025. El objetivo de producción: un total de 300 MWe (35.000 toneladas/año).
Y no sólo Iberdrola es la compañía que tiene en marcha proyectos de hidrógeno verde. Como ejemplos: Cepsa anunció recientemente la puesta en marcha de un corredor verde de hidrógeno entre Algeciras y Rotterdam; los gobiernos francés y español pactaron el nuevo gaesoducto BarMar con vistas a transportar hidrógeno verde; y la operadora Medgaz estudiará los traslados de H2 entre España y Argelia, país que se ha convertido en el principal suministrador de gas de Italia tras los cortes de gas ruso.
Fuente: La Información
Esther de Aragón es licenciada en Geografía e Historia. Lleva varias décadas trabajando para medios de comunicación de diferentes sectores. Además, es escritora y ha publicado libros de temática tan diversa como: guías de viaje, un libro sobre el vehículo eléctrico o una novela