El sector hotelero debe buscar una buena estrategia para rebajar sus costes energéticos. Sólo en Europa se estima que hay más de 5 millones de habitaciones y se necesita una gran cantidad de energía para proporcionar electricidad a todas ellas. Y en concreto se estima que de todo el gasto del 12 al 18% es en iluminación.
El sector hotelero debe reducir el impacto ambiental por el alto consumo energético, y además es beneficioso porque reduce costes. Por ello, se está analizando las tendencias en iluminación hotelera para destacar qué cambios podrían beneficiar tanto a los huéspedes como a la cuenta de resultados de los hoteles. No sólo porque la iluminación es la responsable de un porcentaje significativo del gasto energético de los hoteles, sino también porque afecta enormemente a la percepción que los clientes tienen del establecimiento.
Adiós a las incandescentes
Una iniciativa es incorporar bombillas de bajo consumo, como fluorescentes compactas (CFL) y diodos emisores de luz (LED). La tecnología Led puede remplazar las lámparas halógenas convencionales y conseguir disminuir el consumo de energía en un 80% respecto a la instalación anterior. Además, ocho de cada 10 consumidores piensan que es importante que los establecimientos adopten medidas sostenibles. La legislación en este ámbito cada vez es más estricta y las expectativas que depositan los hoteleros respecto a las operaciones y construcciones medioambientalmente responsables van en aumento.
Si bien son más caras que las lámparas incandescentes, estas tecnologías compensan la diferencia de costes gracias al ahorro de energía – una lámpara CFL se amortiza en unos seis meses, usando un 75% menos de energía y con una duración 10 veces superior a una bombilla incandescente. Una LED utiliza aún menos energía y puede durar hasta 50.000 horas. Ante todo ello, no es de extrañar que se prevea un crecimiento anual del mercado de la iluminación LED en Europa del 41% entre 2010 y 2015.
Auge del control inalámbrico
Los sensores inalámbricos de luz en combinación con sensores de presencia permiten proporcionar la iluminación adecuada, independientemente de la hora. Estas aplicaciones no sólo reducen los costes energéticos mediante la iluminación de un espacio sólo cuando es necesario, sino que también ayudan a evitar el exceso de luz. Los sensores sin hilos hacen que sea sencillo instalar estas tecnologías sin tener que invertir el tiempo y los costes asociados al cableado por el interior de paredes y techos, y hace que sea fácil reconfigurar los espacios en el futuro.
Ahorro sistemático
Los hoteleros también están empezando a explorar cómo integrar de manera más eficiente en sus edificios nuevas tecnologías de ahorro energético. Algunos hoteles ya cuentan con tarjetas-llave, calefacción, aire acondicionado, e incluso los mandos de la radio o de la televisión dentro de una habitación. Este simple cambio limita la cantidad de energía perdida. Ésta es tan sólo una muestra de cómo la automatización puede ahorrar en costes de energía.
Para explorar las posibilidades que cada hotel tiene, GE Lighting cuenta con un equipo de asesores expertos en iluminación hotelera.
Carlos Sánchez Criado
Publicista por la Universidad Complutense. Director comercial de publicaciones técnicas del sector de la energía durante doce años. Director de Energy News Events, S.L. desde 2012 difundiendo información en Energynews.es, movilidadelectrica.com e hidrogeno-verde.es. Y por supuesto, organizando eventos como VEM, la Feria del Vehículo Eléctrico de Madrid.