Castilla-La Mancha produjo, solo en 2014, 31,2 hectolitros de vino, más del 60% de toda la producción que se hace en España. Pero ¿qué se hace con los residuos que genera? El proyecto CLAMBER propone que la valorización integral de hollejos, pepitas de la uva y lías de fermentaciones vinícolas se destine a biocombustible mediante el biogás y el desarrollo de biorrefinerías.
La comunidad autónoma de Castilla-La Mancha se encuentra desarrollando el Proyecto “Castilla-La Mancha Bio-Economy Region” (Proyecto CLAMBER), que sienta las bases para convertir a esta región en el referente del sur de Europa dentro de la investigación relacionada con el aprovechamiento de la biomasa, teniendo en cuenta que es un gran productor de la misma. Dentro de sus principales actuaciones incluye la construcción de un Centro de Investigación, en el que se albergará una Biorrefinería a escala planta piloto modular, siendo pionero en su desarrollo en España.
El vino y las biorrefinerías
Las biorrefinerías, al igual que ocurre con las refinerías de petróleo, consisten plantas para la producción de diversas formas de energía (entre las que se encuentran los combustibles) y productos químicos derivados, de modo que se parte de biomasa (residuos agrícolas, agroindustriales, residuos orgánicos municipales, etc.) en lugar de petróleo.
Para conseguir esta extensa gama de productos se necesitan integrar distintos procesos mecánicos, térmicos, químicos o bioquímicos y tecnologías. El concepto de biorrefinería lleva intrínsecamente asociado un grado elevado de sostenibilidad medioambiental y socio-económica, y obliga a tener una visión integral de toda la cadena de valor.
Por otro lado, el Centro Tecnológico AINIA ha conseguido obtener bioproductos de residuos agroalimentarios procedentes de la industria vitivinícola. En concreto, de la valorización del hollejo y las semillas de uva y las lías de fermentación se han obtenido en una fase piloto aceite de semillas de uva, antioxidantes naturales de alto valor en alimentación, cosmética y farmacia (extractos polifenólicos), biofertilizantes y biogás.
La conjunción de ambos estudios y la situación favorable que tiene Castilla-La Mancha en torno a la generación de residuos vitivinícolas hace que se piense en esta unión como un proyecto de éxito para todos.
Desde un enfoque integrado y sostenible para el aprovechamiento de los subproductos de la industria vitivinícola, se combina la reducción del impacto medioambiental de los residuos y la obtención de nuevos productos de valor.
Sostenibilidad del sector vitivinícola
La elaboración de vino de mesa da lugar a una cantidad anual de unos 18 millones de metros cúbicos de subproductos al año en España. Se estima que de cada 100 kg de vino producido se generan 25 kg de residuos de la uva, que incluirían semillas de uva, hollejos y lías de vinificación, entre los más relevantes.
Hay un interés creciente en la recuperación de los compuestos bioactivos a partir de los derivados de la uva y que van más allá de las técnicas tradicionales como destilar estos residuos para obtener alcohol destilado, rectificado y/o aguardiente. Así, por ejemplo, las semillas de uva son muy ricas en antioxidantes polifenólicos con potenciales beneficios para la salud, hoy muy demandados por la industria de alimentación, nutracéutica y farmacéutica.
El desarrollo de las biorrefinarías en el modelo económico actual pasa por conocer el potencial de las mismas y por profundizar en los usos sostenibles de las biomasas generadas.
AINIA, con su participación en el proyecto CLAMBER, y tras más de 20 años de experiencia en el desarrollo de procesos que implican la valorización de los subproductos de la uva, quiere contribuir a demostrar que la implantación de biorrefinerías vinícolas puede ser sostenible y viable económicamente para el sector, teniendo en cuenta las condiciones de proceso, volúmenes, precio de venta de los bioproductos y concentraciones a obtener, entre otros factores. Esto puede suponer una nueva vía nueva de explotación y rendimiento para bodegas y cooperativas vitivinícolas.
Carlos Sánchez Criado
Publicista por la Universidad Complutense. Director comercial de publicaciones técnicas del sector de la energía durante doce años. Director de Energy News Events, S.L. desde 2012 difundiendo información en Energynews.es, movilidadelectrica.com e hidrogeno-verde.es. Y por supuesto, organizando eventos como VEM, la Feria del Vehículo Eléctrico de Madrid.