Teresa Ribera, ministra para la Transición Económica y el Reto Demográfico ha anunciado durante una sesión del control en el Congreso que el Gobierno estudia parar de forma temporal la nueva tarifa de la luz ante la escalada de precios que se están registrando
El Gobierno está trabajando en medidas coyunturales para bajar el precio de la luz como complemento a las medidas en curso para reformar el sistema eléctrico. Así lo ha anunciado la vicepresidenta y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, quien ha destacado que el Ejecutivo trabaja para suspender elementos fiscales de manera temporal.
Se trata de “medidas provisionales hasta tanto se aborde en profundidad, con rigor y congruencia la reforma de nuestra fiscalidad energética”, ha señalado. “Mientras buscamos una respuesta solvente, es obvio que este gobierno debe de ser sensible y debe preocuparse por los consumidores”, ha subrayado.
Medidas estructurales para reducir el peso de los combustibles fósiles
Además de esta reforma fiscal, el Gobierno trabaja en medidas estructurales para reducir el peso de los combustibles fósiles: “son los más caros y son los que marcan el precio al que se paga toda la electricidad del mercado mayorista, bien directamente, bien porque otras tecnologías optan por ofertar, incorporando el coste de oportunidad que tiene calcular cuánto más pueden ganar acercando su oferta a los costes de la tecnología más cara, el gas natural”.
En este sentido, Ribera ha insistido en que solo el 13% de la generación eléctrica proviene de combustibles fósiles. Sin embargo, son estos los que marcan el precio del mercado mayorista que cobran todas las tecnologías, emitan o no CO2. «El coste de contaminar ha de pagarlo quien contamina y no lo deben pagar injustamente las familias financiando los enormes beneficios que genera la energía limpia», ha destacado.
Estas medidas en preparación se unen a las últimas propuestas normativas del Ejecutivo, como el proyecto de ley por el que se crea el Fondo Nacional para la Sostenibilidad del Sistema Eléctrico (FNSSE) y el anteproyecto de Ley para corregir el dividendo extraordinario que reciben las centrales no emisoras como consecuencia de los costes del CO2 en el mercado de derechos de emisión y actuar, así, sobre el elevado precio de la factura eléctrica.
Las estimaciones apuntan a que el mecanismo para actuar sobre este dividendo de carbono producirá una rebaja cercana al 4,8% para los consumidores domésticos y del 1,5% para los consumidores industriales. Por su parte, el FNSSE, que se aplicará progresivamente en un plazo de 5 años, producirá una reducción del 13% al final del periodo sobre la factura doméstica.
Periodista de cuándo se maquetaba con tipómetro (no, no hace tanto...). Toda una vida dedicada a escribir sobre energía y acerca de cómo la movilidad cambia (para bien) la vida de las personas.