Las calderas de baja temperatura son calderas de bajo consumo, un ejemplo de sistema eficiente ya que consigue aprovechar al máximo la energía y ahorrar entre un 20% y un 40% de combustible. Están pensadas para cubrir las necesidades térmicas en el segmento residencial, terciario y pequeña industria. Ahora la empresa Biocurve lanza al mercado una nueva línea pero de biomasa.
Hasta ahora las calderas de Baja Temperatura se asociaban a calderas de gasóleo, con las características propias de un consumo de combustible fósil. Por eso es noticia que tras más de un año de investigación y desarrollo, la empresa aragonesa Biocurve lanza al mercado la línea de calderas de Baja Temperatura. Esta nueva gama, con potencias que oscilan entre los 25 y los 100 kW y un rendimiento superior al 95%, busca convertirse en el referente para las necesidades térmicas residenciales, de terciarios y pequeñas industrias.
Características de la caldera
Al igual que en la línea de Condensación, Biocurve apuesta por su tecnología patentada y los materiales más nobles para la construcción de las calderas de Baja Temperatura. Todo el material que está en contacto con los gases de combustión, desde el quemador hasta la salida de humos está fabricado en material inoxidable.
Para lograr la máxima adaptación al mercado las calderas pueden ser alimentadas automáticamente por un sinfín, aspiración neumática o tolva integrada para alimentación manual. Una apuesta por la excelencia que está refrendada por los 10 años de garantía que ofrece la marca para toda parte de sus calderas que esté en contacto con el agua.
Caldera de condensación
En una segunda línea de desarrollo, el departamento de I+D+i de Biocurve ha conseguido compactar todavía más su producto estrella BCH100, la caldera de biomasa de condensación más potente del mercado, ofreciendo sus 100 kW en un espacio mínimo: 0,75m2 de planta y 1,77 m de altura.
El trabajo de Biocurve en innovación y su tecnología patentada están avalados por los galardones que año tras año le otorga el mercado de la Biomasa. El último hito que ha obtenido la marca ha sido la certificación europea EN303-5 con la clase 5 para toda la gama con unas emisiones y rendimientos que la sitúan en primera línea. Esta certificación se suma a otros reconocimientos obtenidos por Biocurve, como el premio CREA Ideas en 2013, el premio del concurso de Innovación en ExpoBiomasa 2014 y el Bois Energie d´Argent obtenido en el Salón Bois Energie 2015 (única empresa española laureada en esta feria referente en Francia).
Historia de BioCurve
Esta empresa nace en 2012 de la idea de dos emprendedores aragoneses, Ignacio Quílez y José Manuel Muñoz, que centraron su actividad en el diseño, fabricación y comercialización de calderas. Apenas dos años después consiguieron crear productos un 10% más eficientes «que la media del mercado».
Asimismo, sus calderas son capaces de albergar, en el mismo volumen, hasta un 50% más de superficie de intercambio, aumentando mucho el rendimiento y alcanzando el 102-105% en condiciones estables, lo que supone una importante disminución de las emisiones de CO2.
La empresa, dedicada íntegramente al diseño, fabricación y comercialización de calderas de biomasa, tiene su sede en el Centro Europeo de Empresas e Innovación (CEEI) de Aragón, situado en Zaragoza.
Carlos Sánchez Criado
Publicista por la Universidad Complutense. Director comercial de publicaciones técnicas del sector de la energía durante doce años. Director de Energy News Events, S.L. desde 2012 difundiendo información en Energynews.es, movilidadelectrica.com e hidrogeno-verde.es. Y por supuesto, organizando eventos como VEM, la Feria del Vehículo Eléctrico de Madrid.