El nuevo Reglamento General de Suministro y Contratación, en proceso se tramitación, incluye una importante novedad que podrá poner fin a las incómodas llamadas de las compañías de luz y gas.
Este cambio legislativo, que actualmente se encuentra en fase de alegaciones, plantea entre otras cuestiones prohibir la contratación de la luz y el gas por teléfono.
Proteger a los consumidores
La medida pretende aumentar la protección de los consumidores. A este respecto, los expertos de la organización de consumidores OCU afirman que la aprobación de los cambios en el Reglamento de Suministros pondría fin a cuatro problemas a los que los usuarios se enfrentan de manera habitual.
- En primer lugar, la falta de transparencia en cuanto a las condiciones, tarifas…
«En distintos estudios hemos podido comprobar que a menudo el usuario ni siquiera sabe con quién está hablando, pues el teleoperador no identifica bien a la empresa para la que trabajaba», explican desde la asociación de defensa de los consumidores - En segundo lugar, engaños y abusos. Para los expertos en energía de la OCU, algunas compañías «manipulan datos y engañan al usuario para que facilite informaciones sobre su tarifa, contratación, pagos… que sirven para prometer ahorros que luego no son tales»
- Finalmente, el spam telefónico… «Si no pueden formalizar el contrato, ya no tendrían sentido esas inoportunas llamadas no deseadas ni solicitadas; las compañías solo podrían ponerse en contacto contigo si lo pides», explican
Desde la asociación apoyan prohibir la contratación de los suministros de la luz y el gas por vía telefónica «en aras de una mayor transparencia y protección de los consumidores».
Los expertos calculan que 9 de cada 10 usuarios reciben llamadas comerciales que ellos no han solicitado. Buena parte son de compañías de telecomunicaciones o energéticas que pretenden convencerles de hacer una modificación en el suministro a cambio de una supuesta oferta que les permitirá ahorrar dinero.
Contrataciones a distancia
«Con mucha palabrería, medias verdades y algunos datos no siempre ciertos, el resultado es que, casi sin darse cuenta el usuario se encuentra contratando con una nueva compañía su suministro de electricidad o de gas, y a partir de ahí vienen sopresas y disgustos», afirman.
Es por eso que, desde OCU llevan años denunciando «los abusos que se cometen en este tipo de contrataciones a distancia, especialmente con las compañías de gas y luz (las que reúnen las peores valoraciones de los clientes), aunque no son las únicas». «Por eso consideramos que esta medida debería ampliarse a otras empresas, como las de telefonía, que presentan también los mismos problemas motivados por la falta de transparencia y abusos», apuntan.
Periodista de cuándo se maquetaba con tipómetro (no, no hace tanto...). Toda una vida dedicada a escribir sobre energía y acerca de cómo la movilidad cambia (para bien) la vida de las personas.