Según el último informe de la AIE (Agencia Internacional de la Energía), la economía mundial ha necesitado menos energía para crecer. Esto se debe a las políticas implementadas en el terreno de la eficiencia energética. China destaca entre todas las economías como una de las que mejores resultados está obteniendo en este sentido.
Mientras que los gobiernos se centran en la aplicación de sus compromisos de París, un nuevo informe de la AIE pone en relieve los progresos realizados este año en políticas de eficiencia energética. El papel de la eficiencia energética en la transición energética es fundamental. Hasta el punto de que el AIE explica que no hay posibilidad real de transición energética sin políticas de eficiencia energética.
La intensidad energética como vara de medir
La intensidad energética (la cantidad de energía utilizada por cada unidad PIB), mejoró en un 1,8% en 2015. Lo que significa que la economía mundial necesita menos energía para crecer al mismo ritmo. La mejora supera el 1,5% de 2014. De hecho, las ganancias del año pasado se obtuvieron a pesar de unos precios de la energía más bajos.
No obstante, el informe también hace hincapié en que es necesario seguir mejorando. En concreto, es necesario mejorar al menos hasta el 2,6% de intensidad energética por año para poner al mundo en una vía sostenible. Esto es lo que sería necesario para poner al sector energético en un sistema sin carbono en 2040.
“La eficiencia energética es el único recurso energético que todos los países poseen en abundancia”.
Dr. Fatih Birol, Director Ejecutivo de la AIE
Las políticas de eficiencia energética han conseguido evitar el consumo de 2,3 millones de barriles de petróleo el año pasado. Es decir, el 2,5% de la oferta mundial de crudo. Por otro lado, según la AIE, desde 2000 a 2015, el volumen que se ha ahorrado gracias a las políticas de eficiencia energética está en 540 millones de dólares.
China y su peso en el sector energético mundial
En los datos relativos a 2015 hay un país que destaca por encima del resto. China mejoró su intensidad energética en un 5,6%. Del mismo modo, su demanda energética subió un 0,9%. Sin embargo, su economía logró hacerlo en un 6.9%. Gracias a China, los resultados a nivel mundial fueron tan positivos. Si no, la mejora sólo habría sido de un 1.4% en 2015.
De esta forma, la AIE ha identificado la eficiencia energética como un “combustible” fundamental en la transición energética hacia una economía sin carbono. Su análisis ha demostrado que, más de un tercio de todas las reducciones de emisiones necesaria para alcanzar los objetivos en 2040, pasan por la eficiencia energética. Por ello, se insta a los gobiernos a seguir profundizando en la eficiencia energética como un elementos fundamental de la transición energética a nivel global.
Carlos Sánchez Criado
Publicista por la Universidad Complutense. Director comercial de publicaciones técnicas del sector de la energía durante doce años. Director de Energy News Events, S.L. desde 2012 difundiendo información en Energynews.es, movilidadelectrica.com e hidrogeno-verde.es. Y por supuesto, organizando eventos como VEM, la Feria del Vehículo Eléctrico de Madrid.