Evitar que la temperatura global aumente por encima de los dos grados tendrá beneficios medio ambientales, en la salud de los ciudadanos y también en la economía. De esto último da cuenta un informe que analiza cuántos puestos de trabajo se crearían si se alcanzasen los objetivos del Acuerdo de París. Un adelanto: se cuentan por millones…
Los datos para calcular el impacto en la creación de empleo que tendría alcanzar los objetivos fijados por el Acuerdo de París se basan en un informe elaborado en más de 50 países. La conclusión es realmente positiva ya que adelanta que contener el aumento de temperaturas por debajo de los dos grados permitiría crear más de ocho millones de puestos de trabajo.
«En la actualidad, se calcula que 18 millones de personas trabajan en el sector de la energía, cifra que probablemente aumentará, y no disminuirá, hasta 26 millones, es decir, más del 50%, si alcanzamos nuestros objetivos climáticos globales», afirma Johannes Emmerling economista medioambiental del Instituto Europeo de Economía y Medio Ambiente RFF-CMCC y autor del estudio.
De los ocho millones de puestos de trabajo que, de acuerdo con el informe se podrían crear con la consecución del Acuerdo de París, un alto porcentaje procederá de la fabricación e instalación de fuentes de energía renovable.
El informe establece el siguiente reparto para un hipotético mercado laboral:
- el 84% correspondería al sector de las renovables
- el 11% a los combustibles fósiles
- y el 5% a la energía nuclear
«Mientras que los puestos de trabajo en la extracción de combustibles fósiles, que constituyen el 80% de los actuales, disminuirían rápidamente, estas pérdidas se verían compensadas por el aumento de los puestos de trabajo en la fabricación de energía solar y eólica», afirman.
Movilidad en los puestos de trabajo
El informe revela también que la movilidad de los puestos de trabajo en la industria manufacturera será útil en las zonas en las que la descarbonización está muy extendida.
«En muchos casos, los trabajadores del sector de los combustibles fósiles también tienen influencia política debido a su historial y a las altas tasas de sindicalización, entre otras cosas, por lo que, a medida que avanzamos hacia fuentes de baja emisión de carbono, es importante contar con un plan para la aceptabilidad general de las políticas climáticas», explican los autores del informe.
Periodista de cuándo se maquetaba con tipómetro (no, no hace tanto...). Toda una vida dedicada a escribir sobre energía y acerca de cómo la movilidad cambia (para bien) la vida de las personas.
Lo que a los españoles nos importa es: De esos 28 millones de puestos de trabajo que se generarán, cuantos millones pueden realizarse en nuestro país. La respuesta es un altísimo porcentaje. De los que se pierden como consecuencia del abandono del petróleo y sus derivados, el porcentaje es mínimo ya que no disponemos apenas de crudo. Cuántos puestos de trabajo pueden añadirse mediante la I+D+i. Varios miles. Cuánto dinero puede suponer la venta de royalties y todo lo que ello conlleva. Unas cantidades descomunales. Por éstos motivos y otros muchos, si se alcanzasen los objetivos de París, España sería uno de los países más beneficiados.
España debe luchar con uñas y dientes para conseguir ésos objetivos. Se trata de una nueva «Revolución Industrial.»