Que un coche eléctrico sea cien por cien cero emisiones, depende del dónde y el cómo consiga la elerctricidad que necesita para funcionar. El summum de la sostenibilidad es desplazarnos con un eléctrico que no genera emisiones locales de forma directa y cuya energía se ha obtenido de una fuente renovable y que es muy económica. Pero, ¿es posible? Y, sobre todo, ¿está al alcance de cualquier hogar?
Sí, es posible. La fórmula está en la suma de la movilidad eléctrica y el autoconsumo doméstico o, lo que es lo mismo, utilizar placas solares de autoconsumo para cargar la batería.
El autoconsumo eléctrico se triplicó en 2020, con 113,24 megavatios de placas solares instalados en el sector residencial. Lo mismo sucede con las ventas de coches eléctricos que crecen de forma imparable cada mes.
Instalaciones fotovoltaicas de autoconsumo
Las instalaciones fotovoltaicas de autoconsumo están conectadas a la red eléctrica. Puede ser con excedentes y sin compensación (un sistema que no es eficaz para instalaciones residenciales) o con excedentes y compensación. Con esta última, el hogar puede consumir energía de la red o de sus propias placas, “inyectándose” el excedente a la red eléctrica.
En una instalación conectada se puede colocar un control dinámico de potencia, que permite regular la potencia transformada por las placas solares y la energía de la red contratada mientras se carga nuestro coche.
Con este sistema podríamos cargar el vehículo utilizando únicamente el excedente de energía solar producida o realizar una carga rápida con la máxima potencia combinando energía procedente de la producción fotovoltaica con la energía contratada o balancear la carga con la potencia disponible de la instalación fotovoltaica y el mínimo de electricidad de la red eléctrica necesario para que el vehículo nunca pare de cargar.
¿Cuántos paneles solares se necesitan para cargar la batería de un coche eléctrico?
ha calculado cuántos paneles solares son necesarios para cargar las baterías de sus vehículos eléctricos.
El fabricante francés de vehículos explica que para hacer el cálculo hay que tener en cuenta dos factores:
- La potencia necesaria varía en función del consumo de cada hogar y de la capacidad de la batería del vehículo
- La energía que es capaz de generar una instalación fotovoltaica, depende de la potencia del panel solar (suelen estar entre 150 y 500W) y la zona geográfica en la que lo instalemos, porque no es lo mismo las horas de luz solar y la incidencia del sol en A Coruña (que tienen 1.170 horas solares pico y una capacidad de generación de 2.047 kWh anuales) que en Almería (que tiene 1.710 horas y una capacidad de 3.052 kWh)
Con estos dos datos y tomando como referencia el Peugeot e-208 que ofrece una autonomía de 340 kilómetros (WLTP) con la carga de su batería de 50 kWh, resulta que si recorremos 15.000 kilómetros al año, consumiremos 2.205 kWh de energía anuales. Para conseguir esa energía, necesitaríamos instalar cinco placas solares capaces de producir 450 kWh anualmente, cada una.
Periodista de cuándo se maquetaba con tipómetro (no, no hace tanto...). Toda una vida dedicada a escribir sobre energía y acerca de cómo la movilidad cambia (para bien) la vida de las personas.