En Hare, una ciudad agrícola situada en el suroeste de Etiopía, viven unas 12.500 personas para las que el agua es un recurso tan escaso que a menudo tienen que recorrer varios kilómetros a pie para conseguirlo. ONG Rescate y GFM Fotovoltaica se han unido para facilitar acceso a servicios públicos básicos mediante la instalación de contenedores solares.
Etiopía es uno de los lugares más secos de la tierra. Este año, la situación de extrema sequía ha provocado una crisis alimentaria en el país que afecta a 5,6 millones de personas, describen ambas entidades en un comunicado conjunto.
Mujeres, niños y niñas son las encargadas de buscar y recoger en pozos públicos el agua, que sirve tanto para su consumo como para el mantenimiento del ganado, su principal fuente de alimentación. En esta búsqueda del recurso, las personas deben realizar largos desplazamientos lo que impide, en el caso de la infancia, asistir a la escuela, señala la nota.
Ante esta situación, ONG Rescate, entidad que lleva más de 16 años trabajando en el país para lograr la provisión de servicios básicos de agua a la población de la región, y GFM Fotovoltaica, una pyme española especializada en generación de energía fotovoltaica y en baterías de almacenamiento de energía, se han unido para facilitar acceso a servicios públicos básicos en comunidades rurales remotas de Etiopía.
El objetivo era buscar un modo sencillo y asequible de extraer el agua de pozos profundos y llevarla hasta el pueblo para cubrir las necesidades de la población sin que los niños y las niñas tuviesen que desplazarse, explican.
Contenedores solares
Con la financiación de Cooperación Española, se han construido unos contenedores solares para ofrecer una solución alternativa: la generación de energía renovable y descentralizada en estrecha ubicación para el consumo, sin necesidad de suministro de combustible y redes de distribución de energía de larga distancia.
Esta solución portátil se ha instalado durante el mes de marzo, gracias al trabajo del equipo local de ONG Rescate junto al personal especializado de GFM que acudió al lugar, para, además de asegurar la correcta instalación, formar a personal local, que a partir de ahora se encargará del fácil mantenimiento de esta minigrid portátil que ha sido bautizado como “Planta Fotovoltaica Julia”.
Con esta forma de acceso a agua potable, la población “aumentará los niveles de higiene y salubridad y se reducirá la vulnerabilidad de estas comunidades agropastorales a las hambrunas en épocas de sequía ya que el ganado, su principal fuente de alimentación, dispondrá también de agua y de pasto ya que se instalarán también canalizaciones para el regadío” explica Cristina Bermejo, directora de ONG Rescate.
Se trata, de mejorar la calidad de vida de los habitantes de Hare, dándoles acceso a un bien básico como el agua y la oportunidad de avanzar en su educación. Pero, el mismo sistema podría tener otras aplicaciones. «Conectado a un colegio, por ejemplo, o a un hospital, es una forma sencilla de aportar energía en lugares donde el suministro es irregular o inexistente» comenta Moisés Labarquilla, director de Operaciones e Innovación de GFM.
Carlos Sánchez Criado
Publicista por la Universidad Complutense. Director comercial de publicaciones técnicas del sector de la energía durante doce años. Director de Energy News Events, S.L. desde 2012 difundiendo información en Energynews.es, movilidadelectrica.com e hidrogeno-verde.es. Y por supuesto, organizando eventos como VEM, la Feria del Vehículo Eléctrico de Madrid.