La Asociación para el Desimpacto Ambiental de los Purines (ADAP) anunciaba hace unos días que el Ministerio de Industria aceptaba una moratoria para evitar que las plantas de tratamiento de purines para cogeneración quebrarán con la reforma eléctrica y mostraban su estupor porque Agricultura lo rechazaba. Sin embargo, este Ministerio desmiente esta afirmación de ADAP.
La Asociación para el Desimpacto Ambiental de los Purines (ADAP) y los ganaderos denunciaban la pasada semana el rechazo por parte del Ministerio de Agricultura de la oferta de moratoria propuesta por el Ministerio de Industria, que permitiría hallar una solución al marco retributivo de las plantas de tratamiento de purines, que en el caso de aprobarse tal y como contempla la propuesta de Orden Ministerial estarían en situación de quiebra desde julio del 2013.
Agricultura lo desmiente
Sin embargo, poco después, el Ministerio de Agricultura. Alimentación y Medio Ambiente (MAGRAMA) desmentía esta afirmación de ADAP, al señalar que «en ningún momento ha sido informado ni tiene conocimiento de oferta alguna presentada por otro Departamento ministerial en el sentido señalado, por lo que no se ajusta a la realidad».
El Ministerio, en su comunicado, desconoce las razones que han llevado a ADAP “a denunciar un presunto rechazo por parte del Ministerio de Agricultura de la oferta de moratoria propuesta por el Ministerio de Industria”, pero en cualquier caso, aclara que «el MAGRAMA carecería de capacidad para aceptar, rechazar o alterar el objeto de normativa relativa a la reforma del sector eléctrico, por ser de exclusiva competencia de otro Departamento Ministerial».
Propuesta del transporte
Sin embargo, ADAP afirma en un comunicado que Agricultura no sólo rechaza la moratoria propuesta por el Ministerio de Industria sino que asegura haber encontrado una solución para el sector ganadero mediante el transporte de los purines para su aplicación como fertilizante en cultivos.
Según ADAP, la trampa del transporte como solución más económica del problema, lanzada desde Agricultura, implicará contaminación a corto plazo, al tratarse de un vertido y no de una fertilización, ya que todos los cultivos se encuentran fuera de la época de abono. Por ello, llevará inevitablemente a cerrar instalaciones ganaderas de forma inmediata, produciendo la destrucción de riqueza y empleo del sector en el medio plazo. A la par que el cierre inmediato de las instalaciones de tratamiento, con pérdidas de cientos de millones de euros, y de unos 4.000 empleos directos e inducidos.
No se entiende que Agricultura priorice la solución de vertido masivo con dinero público (entre 2 y 4 €/m3 de purín según las propuestas ya comunicadas a distintas Comunidades Autónomas) frente a la oferta de Industria de dotar una moratoria que permita mantener por tiempo limitado los 300 millones de euros anuales que necesita el sector para abrir un período de diseño de soluciones eficaces y reales del problema para el sector porcino y para el medio ambiente, que haga posible el mantenimiento del empleo en todo el sector.
Moratoria o no, qué hacer con los purines
Mientras se decide si se congela la situación de estas plantas por parte de Industria, lo que está claro es que a las plantas de tratamiento de purín se les condena a la desaparición. Un sector que ha demostrado es viable, con un claro impacto en el medio ambiente y en el sector porcino, es el principal motor económico de muchas comarcas y un referente para la economía española ya que representa más del 14% del PIB industrial, genera más de dos millones y medio de empleos y con un volumen de negocio de más de 6.000 millones de euros anuales.
Carlos Sánchez Criado
Publicista por la Universidad Complutense. Director comercial de publicaciones técnicas del sector de la energía durante doce años. Director de Energy News Events, S.L. desde 2012 difundiendo información en Energynews.es, movilidadelectrica.com e hidrogeno-verde.es. Y por supuesto, organizando eventos como VEM, la Feria del Vehículo Eléctrico de Madrid.