En 2016 se detectaron 110.000 fraudes energéticos en España, un 32% más que en 2015, que provocaron más de 150 millones de pérdidas. La buena noticia es que estos casos se están detectando cada vez más con mayor facilidad, dada la masiva implantación de contadores inteligentes.
El fraude energético es una realidad que afecta gravemente al sector y a la economía de cada país, por ello detectar estas incidencias en la red de distribución permite ahorrar grandes cantidades de dinero en pérdidas. En 2015, según datos de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia, CNMC, estas incidencias provocaron más de 150 millones en pérdidas.
El Instituto de Ingeniería del Conocimiento, IIC, usando técnicas de Big Data y analítica predictiva, colabora con las compañías eléctricas y de gas para detectar y frenar los fraudes energéticos y optimizar el servicio, una práctica que beneficia tanto a las distribuidoras como a los consumidores finales. Este organismo ha explicado a EnergyNews que en nuestro país se está detectando el fraude ahora con mayor facilidad, dada la masiva implantación de contadores inteligentes.
Fraudes energéticos
Tal y como explica el IIC, dentro de las incidencias pueden establecerse dos categorías: actuaciones que inciden sobre la red del distribuidor, como enganches directos a la red, e intervenciones sobre los equipos de medida, como la manipulación del contador. Además, el fraude energético puede producirse a nivel residencial o industrial.
Para Julia Díaz, directora de Innovación del área Health and Energy Predictive Analytics en el IIC, establecer un perfil del defraudador es complicado puesto que es muy variado y entran en juego muchas variables. No obstante, según los datos del IIC, en España en el sector empresarial son las pequeñas y medianas empresas las que más comenten este tipo de faltas. “Aquí, contrariamente a lo que se puede pensar, la gran mayoría del fraude viene de empresas o usuarios con consumo no muy elevado”, explica la directora.
[pullquote]»En España en el sector empresarial son las pequeñas y medianas empresas las que más comenten este tipo de faltas»[/pullquote]
En cuánto a los métodos para cometer el fraude, nos ha señalado que «la picaresca de los defraudadores hace que aparezcan patrones de fraude relacionados con pedradas en contadores o la aplicación de azúcar para que acudan insectos y ralenticen el registro del consumo«, sobretodo en Latinoamérica ya que nos dicen que no les es posible revelar muchos de los datos que manejan referidos a España.
Asimismo, han detectado en esa región la instalación de células fotovoltaicas con baterías que almacenan energía y bypass nocturnos que evitan el registro del uso aire acondicionado por la noche. En cuanto al gas, desde el IIC nos cuentan que hay empresas como pizzerías o panaderías, que realizan un gran consumo y cierran antes de que se les pueda cobrar.
¿Cómo se detectan los fraudes energéticos?
Dada la diversidad de casos, el Instituto de Ingeniería del Conocimiento, emplea tecnología propia que se adapta y renueva según las necesidades específicas de cada problema. Así, el sistema puede amoldarse a los distintos tipos de distribución de energía y a las diferentes zonas geográficas, garantizando siempre el mejor modelo de detección de fraude posible según las necesidades particulares de cada cliente, explica en un comunicado.
Julia Díaz afirma que actualmente el Big Data es la forma más eficaz para acabar con el fraude. “Aplicando técnicas de Big Data y utilizando análisis predictivo es posible ofrecer a las compañías información muy específica de los posibles casos de fraude y optimizar así los recursos. Con la observación de patrones de comportamiento de los usuarios podemos predecir cuáles son potencialmente sospechosos de cometer incidencias en la red energética lo que ayuda enormemente en las campañas de inspección”.
[pullquote]»Con la observación de patrones de comportamiento de los usuarios podemos predecir cuáles son potencialmente sospechosos de cometer incidencias en la red energética lo que ayuda enormemente en las campañas de inspección”[/pullquote]
Normalmente, las distribuidoras realizan controles periódicos a empresas y viviendas particulares. Con el análisis exhaustivo de los datos de cada usuario y la posibilidad de predecir comportamientos gracias al histórico, tarifas, etc. el IIC guía a los inspectores para acudir a aquellos sitios que podrían estar cometiendo alguna falta. El análisis de datos también puede aplicarse a los contadores inteligentes (smart meters) que proporcionan a la compañía los datos en tiempo real.
Carlos Sánchez Criado
Publicista por la Universidad Complutense. Director comercial de publicaciones técnicas del sector de la energía durante doce años. Director de Energy News Events, S.L. desde 2012 difundiendo información en Energynews.es, movilidadelectrica.com e hidrogeno-verde.es. Y por supuesto, organizando eventos como VEM, la Feria del Vehículo Eléctrico de Madrid.
Alguien de mi comunidad de vecinos me está robando energía del contador inteligente de Iberdrola, puesto que solo lo uso un mes, y me corre todo el resto del año. Se trata de un contador inteligente. Tuve varias reclamaciones a Iberdrola a raiz de heredar el piso puesto que había un contador de los antiguos. Me negaron que Iberdrola me cobrase de más. Luego con el C. inteligentye, comprobé que Iberdrola era inocente, pero por más que reclamaba no hacía nada.
Recurrí a instaladores particulares, pero nadie se atrevevía a instalarme una línea nueva puesto que se trata de 13 pisos y se podía dejar a todos sin luz metiendo un cable por la canaleta comunitaria, si se atascaba o arrastraba los demás.
¿Qué puedo hacer? ¿Pueden Uds. ayudarme? Por lo demás el comentario que hacen Uds. está perfectamente claro. Solo falta que alguien quiera remangarse.