En el artículo de opinión de esta semana en EnergyNews, el director general de la Asociación Española de Cogeneración (ACOGEN), Javier Rodríguez, realiza un completo repaso por el decisivo papel que juega la cogeneración tanto en la actividad industrial como en el mercado eléctrico, y reivindica al Gobierno soluciones y actuaciones concretas que garanticen su continuidad así como su peso específico en la transición energética.
En la transición energética, las industrias intensivas en calor contamos con una eficiente aliada, la cogeneración, que sigue dando respuesta a nuestras especiales necesidades en materia económica y ecológica. Además es una eficaz herramienta para lograr una política energética al servicio de la industria.
La industria cogeneradora está plenamente comprometida con el futuro y con lograr un sistema más eficiente, competitivo y ecológico que pasa por desarrollar aspectos pendientes de política energética e industrial como peajes, gestión de la demanda, desarrollo y diseño de mercados, fiscalidad, autoconsumo de proximidad, redes cerradas o compensación de costes de CO2, que es necesario solucionar con celeridad.
A los seis meses de la llegada del nuevo Ejecutivo, y tras su primer paquete de medidas para la transición energética, ahora lo más urgente es atender a la industria que necesita hechos para tomar decisiones de futuro con las que afrontar la desaceleración que parece volver irremediablemente.
La industria cogeneradora pendiente del Gobierno
La respuesta de la industria cogeneradora a la evolución del nuevo modelo productivo que el futuro nos demanda, pasa, primero, por preservar las actuales contribuciones, manteniendo la continuidad de las plantas que llegan al fin de su vida útil regulada. Y después, por contar con un nuevo marco que regule la actividad y la inversión para acrecentar las aportaciones de cara a un futuro bajo en carbono que sólo será posible si se mantiene la competitividad, algo incompatible –técnica y económicamente- con la electrificación del calor de la industria al menos en la próxima década, como reconoce la IEA incluso a más largo plazo.
Gracias a la cogeneración, cientos de industriales generamos el calor y la electricidad que necesitan nuestros procesos con eficiencia económica y ecológica, somos pura eficiencia energética, algo vital para esa transición ecológica que no puede pivotar únicamente sobre las renovables sin recurrir a la eficiencia.
Desde 600 industrias intensivas en calor contribuimos a la generación de riqueza y empleo, porque el 20% del PIB industrial se fabrica con cogeneración en empresas que mantienen más de 200.000 empleos directos. La cogeneración es más que energía de alta eficiencia, los cogeneradores somos industrias de reconocido prestigio y credibilidad. La cogeneración genera casi el 12% de la electricidad del país, empleando el 25% de la demanda nacional de gas y satisfaciendo el 23% de la demanda de energía final de toda la industria española.
La cogeneración es una cuestión clave para la industria y para el país. La responsabilidad de las industrias contrasta en un sector eléctrico en el que las grandes “utilities” se comportan destructivamente con los cogeneradores. La supuesta legitimidad económica de las empresas eléctricas para defender su negocio defenestrando a los cogeneradores no es tal sin el fundamento del bienestar general y social y el respeto a la verdad. Quizá piensen que eliminando a los más eficientes del mix, los cogeneradores, puedan mantener otras opciones de generación en cuestión o aumentar sus costes regulados. Causa estupor que desde la patronal eléctrica se bloquee la cogeneración ante el evidente conflicto de intereses. Tome nota el Gobierno de quién es quién.
En España podemos estar muy orgullosos de la cogeneración que tenemos en funcionamiento, de sus contribuciones presentes y sus potencialidades de futuro, pero la comprensión del papel de la cogeneración requiere un cierto “expertise” y capacitación energética e industrial para encontrar la verdad, un camino en el que muchos se pierden deslumbrados por aquellos que ven en la cogeneración una herramienta de eficiencia que recorta su negocio o un competidor en los mercados contra el que urdir todo tipo de argucias regulatorias y campañas de descrédito, o contra una tecnología que apoya sin complejos su evolución e importancia para la industria y para el país. Si miramos el papel de la cogeneración en la UE y en el resto del mundo, los responsables gubernamentales deberían sonrojarse por no haber impulsado el desarrollo del potencial cogenerador de España. Algo que todo apunta está a punto de revertirse.
Cogeneración en el mundo
La cogeneración está implantada en todo el mundo, especialmente en países desarrollados y en aplicaciones asociadas a la industria. En Estados Unidos hay 82.400 MW instalados, con más de 3.600 industrias, que producen el 12% de su electricidad nacional. En la Unión Europea aún hay más, 125.000 MW de cogeneración que superan el 12% de la electricidad de la Unión y el 15% de su demanda de calor. Por países, Alemania es líder en cogeneración con más de 37.000 MW, seguida de Italia con 8.500 MW; Holanda, Polonia, Finlandia y España, en sexto lugar con unos 4.600 MW operativos.
La relevancia de la cogeneración industrial es incontestable. La cogeneración llegó hace 30 años a la industria española como método más eficaz para satisfacer las necesidades de calor que demandaban los procesos fabriles. Fabricar conjunta y simultáneamente calor y electricidad es un principio de eficacia económica y medioambiental plenamente vigente.
Economía, eficiencia y ecología distribuida por todo el país
La cogeneración es economía e impulso a la actividad industrial: a más cogeneración, más industria, una correlación que promueven y aplican las economías más industrializadas. Es económicamente eficiente, implica un ahorro de energía primaria y emplea menores recursos energéticos para producir las mismas demandas de calor y de electricidad. Y este ahorro energético se traduce en mayor competitividad y en ahorro de emisiones de CO2. Y es la herramienta que impulsa a las industrias a una mejor gestión de la energía.
La economía requiere de mercados eficaces y con bajos índices de concentración, los cogeneradores somos agentes clave en los mercados de electricidad y del gas, muchas industrias independientes imprescindibles para aumentar la actividad y la competencia, aportando generación, demanda y servicios al sistema eléctrico y gasista y contribuyendo de manera sostenible al mantenimiento y desarrollo de sus infraestructuras. La participación de la cogeneración en el mercado mayorista de electricidad logra que los precios sean entre 5,5 y 8 euros MWh menores. Y en cuanto al gas, su desarrollo histórico en España y su futuro en la transición energética, se asienta con base firme en la cogeneración y en la industria.
En la ecología, los resultados de la cogeneración son tangibles y cuantificables en eficiencia energética, reducción de emisiones y ahorro de agua. Las contribuciones de la cogeneración al país se cuantifican en ahorros anuales de 14 millones de barriles de petróleo, 8 millones de toneladas de CO2 y 25 millones de metros cúbicos de agua. El valor económico de las aportaciones de la cogeneración al sistema eléctrico es de 1.420 millones de euros al año, con un superávit de 667 millones de euros, una evidencia de que aporta más de lo que recibe.
A la cogeneración se le “retribuye” para llevar la electricidad al mercado mayorista y se le “cobra” para volver a llevarla donde la generamos inicialmente, en los puntos de consumo en los que se encuentra su valor económico. La cogeneración trae a cuenta y su implantación es prueba de ello como reconoce la Unión Europea y la Agencia Internacional de la Energía.
La pertinaz situación crítica de la cogeneración en España
A pesar de sus contribuciones, la cogeneración en España lleva años en una situación crítica: cinco años a la espera de un Plan Renove que ya contemplaba la Ley del sector eléctrico de 2013. Y seguimos sumando cogeneraciones que están cerca o al final de su vida útil y que necesitan de forma urgente una extensión de su actividad o que de lo contrario se verán abocadas al cierre.
En dos años 49 plantas que suman 500 MW, llegarán al final de su vida útil y 99 industrias, con más de 900 MW, deberán tomar decisiones de inversión y no hay un marco que haga posible estas nuevas inversiones. En cinco años, este final de vida útil afectará a 250 plantas con más de 2.300 MW. La magnitud de las plantas abocadas al cierre en los próximos años es muy significativa: hasta el 6% de la electricidad nacional.
Es un contrasentido que un país persiga la eficiencia pero a la vez permita que el sistema más eficiente se pierda; un país que quiere más industria y que carece de políticas energéticas para ella, coarta las herramientas que usan sus competidores. Desde ACOGEN hemos venido advirtiendo a la Administración de este grave problema, realizando informes, manteniendo reuniones y presentando propuestas. Hace poco el Secretario de Estado mostró públicamente su intención de solucionar el problema: se está trabajando en la solución a la continuidad de las plantas con medidas de extensión de su vida útil hasta que se realice el Plan Renove.
Confiamos en que esa solución llegue. Perder potencia de cogeneración sería desastroso para el sistema eléctrico y gasista; supondría perder sus contribuciones y conllevaría subidas en los mercados mayoristas de electricidad y un batacazo para la competitividad de cientos de industrias.
La cogeneración necesita una regulación que extienda la vida útil de las plantas y que fomente nuevas inversiones. Es la mejor alternativa de futuro para una transición energética que permita una industria fuerte motor económico del país. Esperamos que las medidas en curso se confirmen antes de fin de año y que la cogeneración siga contribuyendo con nuevas inversiones a la eficiencia, economía y ecología para potenciar el futuro del país.
Carlos Sánchez Criado
Publicista por la Universidad Complutense. Director comercial de publicaciones técnicas del sector de la energía durante doce años. Director de Energy News Events, S.L. desde 2012 difundiendo información en Energynews.es, movilidadelectrica.com e hidrogeno-verde.es. Y por supuesto, organizando eventos como VEM, la Feria del Vehículo Eléctrico de Madrid.