Según un estudio de Greenpeace Asia Oriental, la aprobación de nuevas centrales eléctricas de carbón en China descendió notablemente en el primer semestre del año. El motivo es que, durante los dos años anteriores, se permitieron permisos en exceso, lo que ha suscitado la preocupación del Gobierno por el cumplimiento de sus objetivos climáticos.
Tras una revisión de los documentos de los proyectos, la entidad revela que, entre enero y junio, se aprobaron 14 nuevas centrales de carbón con una capacidad total de 10,3 GW, lo que supone un 80% que los 50,4 GW aprobados en el primer semestre del año pasado.
El carbón en China sigue siendo necesario
En 2022, las autoridades chinas aprobaron 90,7 GW en 2022, mientras que en 2023 la cantidad aumentó hasta los 106,4 GW. China es líder mundial en instalaciones de energía solar y eólica, pero las centrales de carbón siguen siendo necesarias en el país en los periodos de máxima demanda, en los que la eólica y la fotovoltaica no logran cubrir el consumo.
Según el estudio, aunque la red china cada vez da más prioridad a las fuentes de energía más ecológicas, los expertos temen que no les resulte fácil desprenderse del carbón una vez esté construida la nueva capacidad.
En el último año, el Gobierno chino ha hecho públicas nuevas estrategias para la reducción de emisiones de carbono y la aceleración de la penetración de las renovables. En esta línea, también apuesta por la energía nuclear para reducir las emisiones.
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El gigante asiático lidera la fotovoltaica a nivel mundial
Actualmente, China es el mayor mercado solar del mundo y lo seguirá siendo durante la presente década por un amplio margen. No en vano, el mercado chino representa el 42% de todas las adiciones de capacidad solar mundial hasta 2030.
China ya ha anunciado en varias ocasiones su intención de alcanzar un pico máximo de emisiones de CO2 en 2030, fijando la neutralidad en carbono para el año 2060.
Para ello, el gigante asiático, que es la segunda economía del mundo, aumentará de forma progresiva la participación del consumo de energía no fósil a cerca del 20% en 2025, un 25% en 2030 y alrededor del 80% para 2060.
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Graduado en Periodismo por la Universidad Complutense. Redactor en energynews.es, movilidadelectrica.com e hidrogeno-verde.es.