Os contamos un caso de éxito de la empresa Leroy Somer que ha revisado el alternador de una planta energética de recuperación de residuos con sede en Lincolnshire, Reino Unido. Montado en la parte trasera de su turbina de vapor principal, estaba cada vez más contaminado por polvo y suciedad.
Leroy Somer trabajó en las instalaciones de Leroy Somer, en Orleans (Francia) durante tres semanas para devolver el alternador -un Leroy-Somer LSA 56, que suministra 4.700 kVA y 11 kV- al mismo nivel de prestaciones que cuando era nuevo.
La planta en cuestión -Newlincs-comenzó a funcionar en 2003, procesando 56.000 toneladas de desechos sólidos del municipio al año. Mediante la incineración de residuos y el uso del calor para producir electricidad, genera una cantidad de energía equivalente a la utilizada por 10.000 familias. La generación de energía eléctrica para su uso in situ (y para la exportación) se realiza mediante una turbina de vapor acoplada al alternador.
«Sin duda, la turbina de vapor es un elemento primordial del funcionamiento en nuestra planta combinada de calor y energía«, afirma el director de la planta Stephen Gilbert. «Así que, cuando notamos que el alternador estaba muy contaminado, se generó cierta preocupación. Como había estado funcionando prácticamente sin interrupción desde 2003, optamos por solicitar una oferta para su revisión total. De hecho, esta idea nos fue recomendada por primera vez por un técnico de Leroy-Somer durante una visita en 2013”.
Aunque en muy buenas condiciones, el alternador ya había funcionado durante 71.000 horas, y la experiencia sugiere que una revisión cada 40.000 horas de funcionamiento rinde dividendos en términos de prestaciones y eficiencia, explica el fabricante en un comunicado.
Alternador de una planta energética
En 2016, Newlincs decidió que no debía esperar más y programó una revisión general. Leroy-Somer, que se encontraba entre los licitadores envió a un experto técnico de su fábrica de Órleans, donde se había fabricado la máquina, para evaluar el proyecto y proporcionar recomendaciones adicionales.
«El factor clave en este proyecto fue el tiempo de respuesta -explica Gilbert-. Teníamos un período limitado y estricto de inactividad de tres semanas en el que el sistema debía desinstalarse, repararse, reacondicionarse y volverse a poner en servicio, sin falta”.
En base a su propuesta, Leroy-Somer ganó la licitación por un servicio integral, desde la desconexión in situ hasta la puesta en servicio nuevamente in situ. Al comenzar el proceso, para referencia, se tomaron medidas de vibración y eléctricas en el alternador antes de ponerlo fuera de servicio. Se paró la máquina, se desacopló de la turbina, se desconectó y se preparó para el transporte.
El proceso
Para sacar la turbina y el alternador fue necesario abrir el techo de la sala de planta e izar fuera el equipo con una grúa de 200 T. El generador fue enviado a Órleans por Leroy-Somer, donde se sometió a las operaciones de revisión. Después del desmontaje y la inspección, los devanados se limpiaron completamente al vapor, y se sometieron a impregnación para renovar el barniz de las bobinas. La caja de conexiones también se limpió por completo y se probaron todos los conectores, prosigue el comunicado.
Después de volverlo a montar, el alternador completo se puso a prueba en el banco de la fábrica, y se compararon las prestaciones eléctricas con las pruebas iniciales realizadas en 2003. El alternador revisado se devolvió al Reino Unido y se volvió a poner en marcha, donde mostró el mismo nivel de rendimiento que cuando fue fabricado 15 años antes, dice el fabricante.
«El alternador regresó dentro del plazo fijado y funcionó a la primera tras la reinstalación y la nueva puesta en marcha«, confirma Gilbert. «No hemos tenido problemas en absoluto con su rendimiento desde la revisión, lo que es esencial, ya que necesitamos que el generador funcione durante 8000 horas al año, que produzca electricidad para todo el lugar, así como 2,5 MW para la exportación«, añade.
En mayo de 2017, exactamente un año después de la nueva puesta en marcha del alternador, el equipo de servicio de Leroy-Somer estaba de regreso en la sede de Newlincs para un chequeo anual del sistema. La rutina de prueba para verificar indicadores mecánicos y eléctricos llevó a la detección de un problema potencial en el puente de diodos, que a su vez podría haber llevado a un fallo general y a la parada de toda la instalación. Como medida de mantenimiento preventivo, se encargó e instaló un nuevo puente de diodos en el generador. El equipo de Leroy-Somer Service volverá al lugar anualmente para generar un informe sobre las condiciones de funcionamiento.
Carlos Sánchez Criado
Publicista por la Universidad Complutense. Director comercial de publicaciones técnicas del sector de la energía durante doce años. Director de Energy News Events, S.L. desde 2012 difundiendo información en Energynews.es, movilidadelectrica.com e hidrogeno-verde.es. Y por supuesto, organizando eventos como VEM, la Feria del Vehículo Eléctrico de Madrid.