Debido al calentamiento del mar, cada vez es más frecuente que el agua esté más cálida de lo normal. La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), adscrita a la Secretaría de Estado de Medio Ambiente del Ministerio para la Transición Ecológica, ha informado de que en los primeros días de agosto se han medido temperaturas superficiales del agua del mar cercanas a los 30ºC en el Mediterráneo y a los 25ºC en el Cantábrico oriental. Estos valores están entre 3 y 4ºC por encima del promedio para la época en dichas zonas.
En este sentido, Rubén del Campo, portavoz de AEMET, ha afirmado que “los datos corresponden a mediciones del agua superficial realizadas por satélites y, en general, la llegada de vientos que remueven el agua o la formación de tormentas sobre el mar provocan un enfriamiento y la vuelta a los valores normales para la época. La reciente ola de calor sufrida en la península ibérica, asociada a una fuerte insolación y estabilidad atmosférica, ha propiciado este rápido calentamiento del mar”.
La temperatura del agua del mar, especialmente en el Mediterráneo, suele alcanzar sus valores más altos a mediados del mes de agosto. Hay que destacar que cada vez es más frecuente que la capa más superficial del agua del mar esté más cálida de lo normal, en concordancia con las mismas anomalías de la temperatura del aire ya suficientemente documentadas. De hecho, varios estudios han constatado el aumento de la temperatura del Mediterráneo en los últimos años.
En relación con este tema, el Quinto Informe del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) advierte de que los océanos están absorbiendo la mayor parte de la energía suplementaria que se está incorporando al sistema climático. Cerca de la superficie, la temperatura oceánica aumenta en promedio 0,1ºC por década, y se estima que el nivel medio del mar a nivel global ha aumentado en 0,19 metros en el período 1901-2010.
Calentamiento del mar sin lluvias torrenciales
En contra de la creencia popular, una temperatura anómalamente alta, es decir, un mar “demasiado” cálido, no tiene por qué desembocar necesariamente en lluvias torrenciales. Estos episodios que se generan en las comunidades mediterráneas en otoño obedecen fundamentalmente a factores atmosféricos, como por ejemplo la llegada de una DANA o “gota fría” al sur peninsular, y sin su existencia difícilmente se producen las lluvias.
De hecho, según José Ángel Núñez Mora, jefe de la sección de Climatología de la Delegación Territorial de AEMET en la Comunidad Valenciana, “el Mediterráneo alcanzó temperaturas cercanas a los 30ºC a comienzos de agosto del pasado año 2017 y el otoño de ese mismo año fue extremadamente seco en la Comunidad Valenciana. La situación de 2017 (mar anormalmente cálido en verano sin lluvias torrenciales en otoño), es un esquema que se repite con frecuencia”.
La Agencia Estatal de Meteorología ofrece, a través de su página web, mapas de la temperatura del agua del mar actualizados diariamente.
Carlos Sánchez Criado
Publicista por la Universidad Complutense. Director comercial de publicaciones técnicas del sector de la energía durante doce años. Director de Energy News Events, S.L. desde 2012 difundiendo información en Energynews.es, movilidadelectrica.com e hidrogeno-verde.es. Y por supuesto, organizando eventos como VEM, la Feria del Vehículo Eléctrico de Madrid.