Un proyecto pionero en España ha recibido luz verde por parte de la Junta de Andalucía: la primera planta desconectada de la red eléctrica y alimentada exclusivamente por energías renovables está en construcción. Este ambicioso proyecto sitúa a Cádiz, y a toda la zona occidental andaluza, a la vanguardia de la transición energética, con el hidrógeno verde como protagonista en esta evolución. Y todo pese a las tensiones fiscales que afronta Cepsa con el Gobierno.
La clausura en 2019 de la central de carbón de Los Barrios (Cádiz), que en su momento alcanzó los 590 MW, pareció marcar el final de una era. Hoy, sin embargo, este icónico lugar simboliza la nueva dirección hacia un modelo energético sostenible, con Arcos de la Frontera como el epicentro de la transformación en la provincia.
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La planta de Arcos, “SolWinHy Cádiz” de Viridi Energías Renovables, representa un gigantesco avance para la provincia gaditana. Este innovador proyecto consiste en una planta híbrida e independiente de la red eléctrica convencional, siendo la primera en integrar la generación de hidrógeno y metanol verdes. Esta iniciativa funcionará únicamente con energía solar y eólica, mediante la instalación de parques cercanos que abastecerán de forma sostenible toda su operación.
Metanol e hidrógeno verdes, combinación ideal
La planta “SolWinHy Cádiz” tiene previsto generar cada año 5.500 toneladas de hidrógeno verde y 29.000 toneladas de metanol verde, alimentándose exclusivamente de un parque eólico y una planta solar. En conjunto, alcanzarán una producción de 386 GWh anuales. Esta energía permitirá que la planta opere de manera completamente autónoma, sin conexión a la red eléctrica.
La Junta de Andalucía ya ha otorgado las autorizaciones ambientales, destacando esta iniciativa por su carácter «verde y transformador». El hidrógeno y el metanol verdes son fundamentales para reducir las emisiones de CO2 en sectores industriales y de transporte, que tradicionalmente han sido difíciles de electrificar.
Viridi Energías Renovables estima que este proyecto logrará reducir hasta un 95 % de las emisiones de CO2 en comparación con los combustibles fósiles. El proceso empleará hidrógeno verde producido mediante electrólisis del agua, combinado con CO2 de origen biogénico, optimizando así su impacto ambiental.
Andalucía apuesta por el hidrógeno verde
Finalmente, Andalucía está capitalizando su estratégica ubicación en el ámbito de las energías renovables. Cádiz se posiciona como un claro ejemplo, al aprovechar sus abundantes recursos solares y eólicos. Actualmente es la segunda provincia en capacidad fotovoltaica del país, con 2.900 MW instalados, y lidera en energía eólica con el 38% de la generación andaluza, gracias a sus intensos vientos.
La consolidada base industrial de Cádiz, junto con la proximidad al Estrecho de Gibraltar y la presencia de puertos internacionales como el de Algeciras, afianzan a Andalucía como la comunidad autónoma responsable del 40% del consumo de hidrógeno verde en España.
Proyectos como el de la planta de Arcos de la Frontera y otros en la provincia han encontrado un impulso vital en la macroiniciativa de Cepsa en el Valle Andaluz del Hidrógeno Verde. Este proyecto apunta a convertirse en una de las mayores infraestructuras del sector en el país, y podría satisfacer un 10% de la demanda de hidrógeno verde en Europa. Este equilibrio sólo podría verse afectado por las tensiones fiscales que el Gobierno central mantiene con la industria.
