El sector del petróleo y el gas está sufriendo un aumento progresivo del precio. En Australia se está renunciando a invertir en infraestructura terrestre por este motivo. ¿La solución? Invertir en infraestructuras offshore.
La compañía Royal Dutch Shell PLC ha colocado la quilla de la plataforma offshore de la Unidad de Licuefacción y Almacenamiento Flotante de Gas Natural Licuado (FLNG). Cuando se termine la construcción, el proyecto, más conocido como «Prelude», será una mega estructura flotante con un tamaño equivalente a cuatro campos de fútbol, para extraer y producir gas natural de yacimientos submarinos hasta ahora inaccesibles o económicamente inviables de producir, convirtiéndose en la instalación flotante en alta mar más grande jamás construida.
Según Rob Kretzers, vicepresidente ejecutivo de proyectos de Shell, la colocación de la quilla significa un hito clave en la historia de “Prelude”. Kretzers explica que «las ideas innovadoras y el uso de tecnología punta, así como el trabajo de los responsables de Shell y de nuestros socios, nos ha ayudado a llegar a este punto de la construcción. El tamaño y la escala del proyecto no tiene precedentes y ya tengo ganas de ver como esta enorme estructura acaba de tomar forma». El casco de la plataforma se montará, próximamente, en el dique seco, antes de ensamblar la torreta y las superestructuras. Una vez completa (pesará 600.000 toneladas y tendrá 488 metros de eslora), se amarrará y conectará a la infraestructura submarina ubicada a unos 475 kilómetros al Noreste de Broome, en la costa occidental de Australia.
Según la compañía, el «Prelude» está diseñado para producir el equivalente a 3.6 millones de toneladas por año (MTPA) de gas natural licuado de los campos submarinos. Sin duda, se trata de la mejor alternativa para monetizar reservas gasíferas en sitios apartados donde no es económicamente viable la producción. Shell producirá, así, gas natural en el mar, lo convertirá en gas natural licuado y luego lo transferirá directamente a los barcos para transportarlo al cliente final. Con el “Prelude” se abrirán nuevas oportunidades para aquellos países que buscan desarrollar sus recursos de gas.
Capacidad equivalente a 175 piscinas olímpicas
Shell ha adaptado su tecnología al nuevo proyecto. Los componentes de la estructura se apilan verticalmente para ahorrar espacio y la planta de refrigeración se coloca encima de los grandes tanques de almacenamiento, con una capacidad equivalente a unas 175 piscinas olímpicas. La instalación de tubos especialmente diseñados extraerán 50 millones de litros de agua fría del océano cada hora para ayudar a enfriar el gas natural.
Carlos Sánchez Criado
Publicista por la Universidad Complutense. Director comercial de publicaciones técnicas del sector de la energía durante doce años. Director de Energy News Events, S.L. desde 2012 difundiendo información en Energynews.es, movilidadelectrica.com e hidrogeno-verde.es. Y por supuesto, organizando eventos como VEM, la Feria del Vehículo Eléctrico de Madrid.