Tras conocerse que Garoña no volverá a operar, APPA Biomasa emitió un comunicado recordando que la biomasa puede compensar la potencia de las nucleares que cierren aportando potencia firme y electricidad gestionable neutra en carbono. La Asociación pide más protagonismo para la bioenergía que apenas supera el GW de potencia en España.
«La potencia aportada por las centrales nucleares que se cierren debería sustituirse con renovables que aporten potencia firme y gestionable, como la biomasa» señaló el martes en un comunicado APPA Biomasa, que reclama un mayor protagonismo para la bioenergía en el mix eléctrico y subastas específicas tras la comunicación del cierre definitivo de la central nuclear de Garoña (Burgos).
El anuncio del ministro de Energía, Turismo y Agenda Digital, Álvaro Nadal, de que el Gobierno deniega la renovación de la central nuclear de Garoña «abre un necesario debate sobre el mix energético que debe tener España en un futuro cada vez más próximo. En este mix, la biomasa aporta potencia firma y gestionable, exactamente lo que necesita el sistema para poder suplir la falta de la central que se va a desmantelar«, señala.
Nucleares por renovables
APPA Biomasa recuerda que la producción de electricidad con biomasa permite muy altas utilizaciones, de hasta 8.300 horas/año, y se lamenta de que a pesar de ello esta tecnología ha sido «la gran olvidada de las subastas celebradas en 2017«.
“El precio no puede ser la única variable que se considere, especialmente cuando la biomasa es una de las renovables que mayor estabilidad tiene, independientemente de las condiciones estacionales o atmosféricas”, apunta Jordi Aguiló, presidente de APPA Biomasa.
Desde la Asociación insisten en que los objetivos de renovables y descarbonización marcados para 2020 y los que se están barajando para 2030 y 2050, hacen necesario que todas las tecnologías renovables, especialmente las gestionables y que aporten potencia firme al sistema, sean tenidas en cuenta.
Subastas específicas
En la actualidad, España cuenta con 519 MW instalados de biomasa sólida, 225 MW de biogás y 294 MW correspondientes a la fracción de residuos renovables. «En total, apenas 1.038 MW instalados de bioenergía en nuestro mix eléctrico que podrían aumentar considerablemente de contar con subastas específicas para estas tecnologías«, explica APPA Biomasa.
Además, según Aguiló, los beneficios medioambientales y sociales deben ponerse en la balanza a la hora de diseñar la transición energética del país: “el uso de la biomasa evita la quema descontrolada de residuos agrícolas, reduciendo las incendios y valorizando los recursos del campo. Adicionalmente, genera 30 empleos por megavatio que quedan fijados en zonas rurales, tradicionalmente castigadas por el desempleo”.
Carlos Sánchez Criado
Publicista por la Universidad Complutense. Director comercial de publicaciones técnicas del sector de la energía durante doce años. Director de Energy News Events, S.L. desde 2012 difundiendo información en Energynews.es, movilidadelectrica.com e hidrogeno-verde.es. Y por supuesto, organizando eventos como VEM, la Feria del Vehículo Eléctrico de Madrid.