Los objetivos de Shell para reducir sus emisiones son realmente ambiciosos. Y eso, a pesar del complicado momento que vivimos por la pandemia y de la actual situación del petróleo. La compañía quiere eliminar las emisiones netas de sus operaciones y la mayor parte de los gases de efecto invernadero del combustible que vende.
Según Bloomberg, la compañía angloholandesa sigue los pasos de otras empresas como BP y Repsol. Estas metas indican que las compañías de petróleo, aún en estos complicados momentos, no abandonan el camino de a transición a una energía más limpia.
Shell apunta a tener cero emisiones netas en sus propias operaciones, una categoría conocida como alcance uno y dos, para 2050.
También prevé reducir la huella de carbono de los productos energéticos que vende a clientes, llamadas emisiones de alcance tres, alrededor del 30% para 2035 y el 65% para 2050. Para lograr esto, la compañía venderá productos con menores emisiones de carbono, como energía renovable, biocombustibles e hidrógeno.
El sector del petróleo se está viendo cada vez más presionado por los grupos ambientalistas y activistas. En esa línea, Bloomberg recuerda que el pasado miércoles un grupo de administradores de activos pidieron a Total adoptar más medidas contra el cambio climático. Fue durante su junta de accionistas.
Objetivos de Shell en medio de la pandemia
La medida se produce incluso cuando la Agencia Internacional de Energía ha explicado que los planes de transición energética de las grandes empresas podían peligrar. La pandemia actual y el colapso resultante del precio del petróleo amenazan esos objetivos.
En esa línea, tanto BP como Shell, entre otros, mantienen sus intenciones de seguir adelante.
Sin embargo, no todo el mundo ve de la misma manera la apuesta de Shell. Las críticas llegan porque los objetivos de la petrolera no parecen estar alineados con los Acuerdos de París. Es lo que alega el grupo inversor holandés “Follow This”:
“El objetivo de Shell de reducir las emisiones de carbono de alcance 3 en un 65% para 2050 equivale a un corte absoluto en las emisiones del 50%”.
Follow This
presentó, previamente, una resolución de accionistas pidiendo a la empresa establecer objetivos concretos. Pero Shell aconsejó a sus accionistas que votaran en contra del plan, calificándolo de «innecesario» y «contraproducente«.
Greenpeace también dijo ha calificado el plan de impreciso. Un portavoz de Shell ha dicho que la compañía dará detalles de su plan estratégico en el tercer trimestre del año. Y que entonces describirá sus primeros pasos.
No será fácil el camino. Según apunta Bloomberg, las intenciones de BP van en similar dirección, en cuanto a reducción de emisiones. Pero la propia BP ha explicado que los detalles para conseguir esos objetivos aún no están resueltos. En esencia, estas compañías siguen siendo productores de petróleo y gas y necesitan cambios drásticos para que sus planes de emisiones cero funcionen.
Emisiones de Shell
Las emisiones de gases de efecto invernadero de Shell en 2019 disminuyeron. Pero la causa está en la venta de activos, según la propia compañía. La quema de gas aumentó en 2019, pero redujo las fugas de metano, un gas de efecto invernadero más potente que el dióxido de carbono.
Y mientras las grandes petroleras europeas establecen medidas más ambiciosas de emisiones, las promesas de sus homólogos estadounidenses siguen siendo modestas. Los planes de Exxon Mobil Corp. y Chevron Corp. se limitan principalmente a reducir la quema de gas y las fugas de metano. Exxon no informa de las emisiones de alcance 3, diciendo que éstas son una cuestión de demanda y que están fuera de su control.
Esther de Aragón es licenciada en Geografía e Historia. Lleva varias décadas trabajando para medios de comunicación de diferentes sectores. Además, es escritora y ha publicado libros de temática tan diversa como: guías de viaje, un libro sobre el vehículo eléctrico o una novela