A través de su firma Pontegadea, Amancio Ortega ha comprado a Repsol el parque eólico Delta. El dueño de Inditex ha adquirido un 49% de esta instalación zaragozana.
Amancio Ortega, uno de los hombres más ricos del mundo gracias a su negocio textil Inditex, ha cerrado la compra del 49% de Delta, el parque eólico de Repsol en Zaragoza.
La transacción se ha llevado a cabo a través de la firma Pontegadea y ha supuesto una inversión de 245 millones de euros. Con esta transacción, el valor de Delta ascenderá a 500 millones de euros, según informan ambas compañías en un comunicado.
“La entrada de Pontegadea en el accionariado de Delta refuerza la posición de Repsol como operador industrial y demuestra la vigencia de su modelo de crecimiento en renovables basado en el desarrollo de proyectos desde las etapas iniciales hasta la puesta en marcha” ha afirmado la compañía energética.
Segunda compra energética para Amancio Ortega
La compra del parque eólico es la segunda operación energética que el grupo gallego lleva a cabo en las últimas semanas, tras la adquisición del 5% de Red Eléctrica. Poco después, se hizo con un 12% de la gestora de la red eléctrica y de gas de Portugal, en una compra valorada en unos 190 millones de euros. Pero además, ostenta un 5% de Enagás, en la que entró por cerca de 280 millones.
«Esta operación forma parte de la estrategia global de inversión de Pontegadea y refuerza el compromiso medioambiental que acompaña a todas las actividades de nuestra cartera, ya sea en el sector energético, gestión de activos inmobiliarios o distribución textil», ha dicho Roberto Cibeira, consejero delegado de Pontegadea.
El Grupo Pontegadea está formado por las empresas de Amancio Ortega. Controla una participación mayoritaria en Inditex, con un 59,20% del capital; además es una de las principales gestoras de activos inmobiliarios privados en Europa, América y Asia.
Periodista de cuándo se maquetaba con tipómetro (no, no hace tanto...). Toda una vida dedicada a escribir sobre energía y acerca de cómo la movilidad cambia (para bien) la vida de las personas.